La Organización Mundial de la Salud (OMS) emitió una declaratoria de emergencia sanitaria internacional por la viruela del mono.
El pasado 23 de julio, la organización señaló que las instituciones de salud se encuentran trabajando para contener el brote de la enfermedad.
De acuerdo con Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS, la viruela del mono tiene presencia en 74 países. Además, se ha contagiado entre 17 mil personas, con alta presencia en Europa y menor en el resto del mundo.
“He decidido declarar una emergencia de salud pública de alcance internacional“, expresó Tedros Adhanom.
El responsable de emergencia de la OMS, Mike Ryan, aseguró que este es el primer paso para alertar a la población y generar acciones colectivas contra el tipo de viruela.
Debido al aumento de contagios desde mayo de este año que se ha extendido desde África central y occidental, la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) recomendó amplificar el uso de una vacuna para combatir la propagación de la viruela del mono.
Para prevenir a la población, la Unión Europea aprobó el biológico Imvanex de la empresa Bavarian Nordic en 2013.
Aunque no es la cura contra la enfermedad, se decidió que fuera utilizada para tratar la viruela del mono por su similitud.
Con ello, se busca que las personas más vulnerables, trabajadores de la salud y con mayor riesgo de contagiarse, accedan a la vacuna de inmediato.
El primer caso de viruela del mono en un ser humano se detectó en el año de 1970, logrando ser erradicada hasta 1980. Es menos peligrosa que la convencional y los enfermos son en su mayoría hombres jóvenes que tienen relaciones con otros hombres.
De acuerdo con un estudio publicado en el New England Journal of Medicine, 95 por ciento de los casos de viruela del mono se contagiaron vía sexual; en ese entonces, se tomaron en cuenta a 528 personas de 16 países, siendo uno de los más completos y amplios actualmente.