Durante años, la eficacia de la medicina homeopática ha sido objeto de controversia y debate. Sin embargo, en México es muy popular debido a que es una alternativa natural y no tan invasiva para tratar algunos padecimientos y enfermedades. Entre los medicamentos homeópatas más comunes se encuentran los chochitos y las gotas, ¿has probado alguno de ellos?
Si lo has hecho, sabes que estas pequeñas pastillas tienen un sabor dulce y están impregnadas de alcohol. En torno a este tema hay información que tal vez desconozcas, es por eso que en Ambas Manos te contamos algunos mitos y verdades sobre este medicamento.
En principio, la medicina homeopática tiene más de 200 años de existir y de que se utiliza. El médico alemán Samuel Hahnmemann fundó la primera escuela de esta rama en el siglo XVIII. Al respecto, la homeopatía se basa en que “lo similar cura lo similar”. Dicho de otra forma, una sustancia que provoca algunos síntomas en una persona sana, puede utilizarse para tratar esos mismos síntomas en un enfermo.
Comienzos
En México, la medicina de este tipo comenzó a utilizarse en 1850 y la Secretaría de Salud la reguló en 1995. Actualmente hay escuelas de homeopatía y se considera a esta práctica como una especialidad médica en muchos países. De hecho, en la India, Argentina, México y algunas partes de Europa existen clínicas y hospitales homeópatas que integran el sistema de salud pública.
Por su parte, en la Ciudad de México se encuentra el Hospital Nacional Homeopático. En el que se proporciona atención médica a la población en general basada en esta práctica.
Los homeópatas toman en cuenta los síntomas, el estado emocional y físico de cada paciente para medicarlo. Es decir, el tratamiento se personaliza para cada paciente y se basa en su historia médica y de vida.
No obstante, para comprar medicamentos homeopáticos como los chochitos no es necesario acudir a un hospital. Los puedes comprar en algunas farmacias, tiendas especializadas y hasta en Mercado Libre o Amazon.
Realidades y mitos de los chochitos
- Los chochitos son pequeñas pastillas de color blanco. En realidad, su nombre correcto es glóbulos.
- Generalmente, vienen en frascos de color ámbar para que las pastillas estén protegidas de la luz del sol y la artificial.
- Estos comprimidos están elaborados con sacarosa y lactosa por eso tiene sabor dulce. También contienen una mezcla homeopática, la cual se extrae principalmente de plantas. Esta mezcla se disuelve en agua y alcohol y finalmente se rocía sobre los glóbulos.
- La sustancia activa de estas pastillas se diluye varias veces. A este proceso se le conoce como dilución y se realiza en numerosas ocasiones para evitar la toxicidad y los efectos secundarios.
- De hecho, los chochitos no son dañinos. Debido al proceso de dilución, en ocasiones, la sustancia activa es baja o inexistente, por lo que algunos consideran a estos medicamentos como placebos.
- Estos medicamentos y las gotas son los más comunes pero también existen tabletas, soluciones inyectables, aerosoles nasales y hasta supositorios.
- Los chochitos no se tragan como una pastilla normal ni se mastican. Se deben colocar debajo de la lengua para que el efecto sea más rápido y duradero.
- Existen algunos casos documentados en los que se utilizaron medicamentos homeopáticos para curar enfermedades complejas y únicamente agravaron la situación. Incluso los pacientes fallecieron.
¿Qué enfermedades se pueden tratar con los chochitos homeopáticos?
Los chochitos se pueden utilizar para tratar cualquier enfermedad o padecimiento debido a que no son tóxicos. Sin embargo, en caso de padecer enfermedades graves o si el malestar a tratar no mejora, es recomendable suspender su uso y asistir con un médico tradicional.
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