Un aficionado de Boca Juniors se suicidó tras la derrota del equipo ante Fluminense en la final de la Copa Libertadores.
El trágico suceso conmocionó a Argentina y la noticia rápidamente invadió las redes sociales en todo el continente.
Al aficionado lo identificaron como Marcelo Morales de tan sólo 23 años de edad. De acuerdo con la policía de Buenos Aires, decidió quitarse la vida por su voluntad.
Medios locales señalaron que días previos al encuentro, el joven advirtió a su padre las medidas que tomaría, ya que no podría soportar la derrota de Boca.
Un día después de haberse jugado la final el pasado sábado 4 de noviembre, reportaron que a Marcelo lo encontraron sin vida.
Al darse a conocer el caso, la madre de Marcelo envió un mensaje a los jóvenes para que reflexionen sobre sus acciones y el dolor que puede provocar entre las familias.
En entrevista con el medio Crónica TV, dijo: “No pensé que mi hijo iba a llegar a ese límite de matarse. Hace algunas semanas le había dicho al papá ‘si Boca no gana el 4 de noviembre yo me mato’. Pensamos que estaba haciendo un chiste. Que tomen conciencia los jóvenes, que piensen en su familia”.
Agregó que Marcelo “era un fanático, era fanático de Boca. Si perdían estaba mal, deprimido. Se ponía mal, triste, se daba piña y decía que no podía perder, que era lo más grande Boca”.
Sin recibir consuelo y en medio del llanto, la mujer aseguró que Boca Juniors es una basura.
Boca es una basura, porque a mi hijo me lo mataron, por ellos se mató; y no hay ningún jugador, no hay nadie que me dé el pésame”.
En redes sociales, cientos de personas lamentaron la muerte de Marcelo y enviaron condolencias a su familia.