Este 13 de diciembre de 2023 se cumple un año de la muerte de Miguel Barbosa, exgobernador de Puebla. El exmandatario fue víctima de un infarto y su muerte se ocultó por algunas horas hasta que la tarde de aquel martes trece de diciembre, cuando la noticia fue dada a conocer por su vocera Verónica Vélez antes de que iniciara una comida con directores de medios de comunicación por las fiestas decembrinas.
Barbosa falleció a los 63 años. A sus funerales asistió el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador quien, hoy sabemos, accedió a que su esposa y funcionarios cercanos cabildearan quién sería el gobernador sustituto.
En los primeros minutos del 15 de diciembre, a Sergio Salomón Céspedes lo nombraron gobernador sustituto del estado. Su llegado dio un giro de 360 grados al estilo gubernamental y político de su antecesor.
Hoy, a un año de distancia, el liderazgo político en Puebla se mantiene con Sergio Salomón Céspedes quien recompuso la relación del gobierno con el gremio empresarial, académico, periodistas, y grupos políticos de toda índole.
La “reconciliación” ha sido el lema del nuevo gobierno que, además, dio mantenimiento a las ciclopistas y parques abandonados por el morenovallismo, y ha anunciado una serie de obras emblemáticas para el cierre del sexenio.
Mejoró por mucho la relación del gobierno con el presidente, Andrés Manuel López Obrador. Dio entrada al IMSS-Bienestar y hoy a la Marina para labores de seguridad.
Se reacomodó una clase política que sería distinta si el gobernador siguiera vivo. Lo único que, tal vez, prevalecería, es que Nacho Mier tampoco hubiese sido candidato.
La esposa del exgobernador, Miguel Barbosa, Rosario Orozco intentó participar en el proceso interno de Morena para convertirse en candidata a la gubernatura, pero no lo logró. Hoy busca ser la candidata a diputada federal por Tehuacán.
Las “corcholatas” de Barbosa
Antes de morir, Miguel Barbosa ya había apostado por la hoy coordinadora nacional de Morena, Claudia Sheinbaum para que se convirtiera en la sucesora del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con el argumento de generar estructura a su favor, mandó a sus “corcholatas” a una gira por todo el estado para también promover a sus afines a la candidatura por el gobierno de Puebla.
Los perfiles que Barbosa apoyaba eran: Sergio Salomón Céspedes, Olivia Salomón, Melitón Lozano y José Antonio Martínez.
Las giras las encabezaron Julio Huerta, quien en la elección interna de Morena intentó lograr la postulación a la gubernatura. En ese entonces no lo buscaba, impulsaba a Sergio Salomón, quien era el presidente del Congreso.
La nueva clase política
Con la muerte de Miguel Barbosa surgió una nueva clase política a cargo del gobernador, Sergio Salomón Céspedes, quien hizo cambios estratégicos en su gabinete para acomodar a sus cercanos.
En la secretaría de Gobernación dejó a Julio Huerta, hasta que tuvo que pedir licencia para ir al proceso interno de Morena. Una vez fuera, nombró a Javier Aquino, su compañero político de años.
En el círculo cercano del mandatario estatal se movieron, además de Aquino, su director de Comunicación Social, Alejandro Suárez; la extitular de Economía, Olivia Salomón; el subsecretario de Gobernación, Andrés Villegas; y el diputado y su excompañero del Congreso local, Jorge Estefan Chidiac.
Ellos desplazaron a los poderosos que acompañaban a Barbosa.
La liberación de los llamados “presos políticos”
Sin duda, el hecho más notorio tras la muerte de Miguel Barbosa fue la liberación de los llamados “presos políticos”. Empresarios, funcionarios, exfuncionarios, y alcaldes que fueron detenidos durante su administración.
Hoy todos, incluso el operador morenovallista Eukid Castañón, se encuentran libres. Pocos exculpados, la mayoría lograron el beneficio que les otorgaba la ley de seguir sus procesos fuera de la cárcel.
Algunos de los liberados han sido Navarro, exalcalde de Ciudad Serdán; el exregidor panista, Sergio Quiroz Corona y José Guillermo Aréchiga Santamaría, extitular de la Secretaría de Movilidad y Transporte (SMT).
También Alejandro Martínez Fuentes, expresidente municipal de Quecholac, el exmagistrado Alfonso Siriako Guillén Almaguer y Rodolfo Chávez Escudero, el exdirector de Carreteras de Cuota.
Nacho Mier pierde… Armenta gana
Uno de los más fervientes cometidos políticos de Miguel Barbosa sí se cumplió, impedir que el diputado federal de Morena, Nacho Mier se convirtiera en candidato al gobierno del estado.
Casi inmediatamente después de la muerte de Barbosa, Mier arrancó una ambiciosa campaña por tierra y aire para promoverse para el proceso interno de Morena. El objetivo era ganar la encuesta.
Sin embargo, el 10 de noviembre, el partido dio como ganador definitivo del proceso al senador Alejandro Armenta Mier.
Hoy es Alejandro Armenta quien conforma los comités internos de Morena para la estructura electoral del 2024.