¡Te vas a chupar los dedos! Los deliciosos y famosos tamales preparados al estilo Teziutlán los encuentras en este negocio ubicado en el Centro Histórico de Puebla.

Ambas Manos visitó Tlayoyos Abdy, un local de comida tradicional con sazón traído desde la Sierra Norte de Puebla.

Tlayoyos Abdy, un local de comida tradicional de la Sierra Norte en el Centro Histórico de Puebla. credit: Carmen González

Originarios del Pueblo Mágico conocido como “La Perla de la Sierra”, Azucena y su esposo iniciaron este negocio en la capital poblana.

A su llegada, empezaron con un pequeño puesto ambulante en la 10 Poniente, vendiendo uno de los alimentos más emblemáticos de Teziutlán: los tlayoyos.

Este sencillo pero delicioso platillo hecho de masa y alverjón fue bien recibido por su rico sabor y precio accesible.

Hace casi cinco años, lograron instalar su primer local en la calle 12 Poniente número, 1008 entre las calles 3 y 5 Norte.

Desde entonces, a sus clientes se le ha hecho costumbre visitar el negocio para desayunar o comer muy a gusto sin gastar mucho.

Tamales estilo Teziutlán y todo lo que puedes comer en Tlayoyos Abdy

De lunes a sábado, de 9:30 a 16:00 horas, los comensales podrán degustar tlayoyos, picaditas, tamales y quesadillas.

Las picaditas, quesadillas y tlayoyos pueden ir acompañados de una variedad de salsas: verde,chipotle, chiltepín y habanero.

Además de su respectiva cebolla, queso y crema, pueden llevar un extra de bistec, longaniza o chicharrón.

Debido a su gran popularidad, la familia puede llegar a preparar en un día entre 3 mil y 5 mil tlayoyos.

Equipo que labora en Tlayoyos Abdy. credit: Carmen González

Sin embargo, el antojito preferido del lugar es el tamal “estilo Teziutlán”, que va preparado igual que un tlayoyo.

De acuerdo con Azucena, fueron los mismos clientes quienes comenzaron a pedir así sus tamalitos rellenos de pollo, salsa roja. Y un toque de hoja de aguacate que le da ese sabor único.

Tamalitos “estilo Teziutlán” rellenos de pollo, con salsa y queso. credit: Carmen González

Pero la diferencia entre ambos es que en la orden de tamales (3 por 50 pesos) van fritos con manteca antes de agregar el resto de los ingredientes.

No por nada la familia llega a vender entre 300 y 400 piezas al día, muestra de la calidad y sabor que le añaden al platillo.

No olvides pedir un vaso de agua fresca de jamaica, horchata o un refresco. Si te queda espacio, cierra la comida con un postre, ya sea flan o una gelatina.

BUAP - San Martin
Carmen González

Carmen González

Licenciada en Comunicación por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Reportera desde 2018 de la fuente de cultura, turismo, activismo, temas sociales y de revista.