De enero a noviembre de 2022, los delitos en Puebla crecieron 4 por ciento, en comparación con el mismo periodo de 2021. Evasión de presos, narcomenudeo y hostigamiento sexual fueron los que más subieron. Mientras, el feminicidio y la trata de personas mostraron las mayores bajas.
De acuerdo con los datos de la Fiscalía General del Estado (FGE), de enero a noviembre hubo 71 mil 114 denuncias, contra las 68 mil 400 del mismo lapso de 2021.
La evasión de presos aumentó 100 por ciento, seguido del narcomenudeo con 42.5 por ciento.
Con 32 por ciento de alza, estuvo el hostigamiento sexual; 23 por ciento los delitos contra el medio ambiente y 19 por ciento, el homicidio.
La falsificación subió 17.5 por ciento; los delitos cometidos por servidores públicos,16.7 por ciento y la desaparición de personas, 16.2 por ciento.
El delito de falsedad tuvo un aumento de 15.6 por ciento, otros delitos del fuero común subieron 14 por ciento y el abuso sexual creció 13.7 por ciento.
Con 10 por ciento de crecimiento en los 11 meses de 2022, estuvieron otros delitos contra la vida y la integridad.
El robo creció 6 por ciento; las lesiones, 4.8 por ciento, la corrupción de menores, 3.5 por ciento y otros delitos contra la familia, 3.5 por ciento.
El fraude mostró una alza de 3.1 por ciento, la extorsión del 1.8 por ciento y el daño en la propiedad, 1.5 por ciento.
Con sólo 0.72 por ciento de incremento, estuvo el incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar.
Delitos a la baja en Puebla
En contraparte, los delitos a la baja fueron el aborto con 80 por ciento y los electorales con 78.6 por ciento. Sin embargo, cabe resaltar que 2021 fue año de elecciones y 2022, no.
El feminicidio disminuyó 42.4 por ciento, otros delitos contra la sociedad bajaron 24.6 por ciento y la trata de personas, 20 por ciento.
Con bajas de 10 por ciento, estuvieron otros delitos contra al patrimonio y otros que atentan contra la libertad.
En 9.6 por ciento, bajó la violación simple, mientras que la violación equiparada cayó 9.5 por ciento. El despojo disminuyó 6.6 por ciento; el secuestro, 5.5 por ciento; la violencia familiar, 4.4 por ciento y el acoso sexual, 2.4 por ciento, al igual que el allanamiento de morada.
Con el mismo porcentaje de disminución, estuvieron otros delitos que atentan contra la libertad sexual.
Finalmente, el abuso de confianza bajó 1.5 por ciento y las amenazas, 0.84 por ciento.