Después de casi siete años, por fin estará listo el hospital regional de San Alejandro del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). El director Zoé Robledo anunció que reinicia operaciones en agosto de este 2024.
Tras un recorrido realizado para supervisar las obras de reconstrucción, el director del IMSS informó que hasta el momento hay un avance de poco más del 40%. Sin embargo, se estima que en los próximos seis meses acabe la construcción.
El hospital de San Alejandro tendrá solo 180 camas, cuando antes contaba con 415, para la atención de derechohabientes, así como áreas de atención clínica especializada. Se espera que el presidente Andrés Manuel López Obrador pueda hacer la entrega del proyecto que está pendiente desde septiembre de 2017.
Zoé Robledo informó que, sumado a la ampliación de la Margarita y la nueva unidad de Cuautlancingo, Puebla cerrará el año con más de 400 camas de atención médica.
A 7 años del S19, por fin retomará operaciones el IMSS de San Alejandro
El Hospital Regional de Zona 36, mejor conocido como San Alejandro, tuvo afectaciones graves tras el sismo del 19 de septiembre del 2017.
De manera inmediata, el instituto decidió inhabilitar el hospital y trasladó su equipamiento y pacientes a otras unidades de Puebla. Ahí comenzó el problema de sobrepoblación en el hospital de La Margarita.
Los dictámenes arrojaron que ya no era posible la reparación. En ese entonces, la administración federal de Enrique Peña Nieto compró un terreno en San Andrés Cholula para construir el sustituto de San Alejandro.
Pero a un año de adquirir el predio, solamente se habían construido los cimientos y la estructura superficial del inmueble; con el cambio de administración, el proyecto quedó en el olvido.
En 2019 se decidió que se llevaría a cabo la demolición y reconstrucción del hospital en su mismo lugar y en 2020 se determinó que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) se encargaría de la obra.
Sin embargo, la llegada de la pandemia retrasó el proyecto y a la par evidenció la urgencia del nuevo hospital. Fue entonces, hasta 2022, cuando comenzó la reconstrucción.
Por esta construcción, la Auditoría Superior de la Federación (ASF) evidenció que el IMSS firmó arbitrariamente convenios con la Sedena y con la UNAM, con esta última para la elaboración del anteproyecto conceptual y proyecto ejecutivo para la sustitución del Hospital
