“El Supremo Café & Tocino” se encuentra en un escándalo por ocultar un accidente laboral en el área de producción y despedir a la empleada para no hacerse cargo de los gastos médicos. Laura Ramírez expuso el caso en sus redes sociales y pidió difusión.
La joven de 22 años de edad explicó que el 6 de enero pasado sufrió un accidente en la empresa, propiedad de Esther Hernández García y su esposo Luigi Tlachi Gutiérrez. Un compañero, por error, tiró salsa al piso y no limpió; ella, al pasar hacía el almacén, se cayó y golpeó la rodilla derecha.
Sus compañeros la auxiliaron y ayudaron a levantar, pero acusó que la chef Jassiel Martínez intentó ocultar el accidente de trabajo a la gerente de nombre Andrea.
La chef solicitó un kit de primos auxilios para dolor de cabeza, cuando ella sentía mucho dolor en la rodilla. Después de varios minutos y al ver que el dolor no cedía, se le notificó a la gerente lo sucedido.
Andrea, “inmediatamente tomó cartas en el asunto”. La llevó a una sucursal cercana de Farmacias Fleming y ahí le recetaron analgésicos, pomadas y reposo absoluto. Laura estuvo en reposo dos días, pero nunca mejoró.
El 9 de enero contactó a la gerente para informarle que todavía no se podía presentar a trabajar y ella le recomendó buscar a un ortopedista. Todos los gastos correrían a cargo de la empresa: “al final de cuentas fue un accidente de trabajo”, recalcó la joven.
Contrario a lo que prometió Andrea, “El Supremo Café & Tocino” solo pagó las consultas, no los medicamentos y de los mil 300 pesos de una resonancia magnética, solo le entregaron la mitad. El especialista le dijo a Laura que estaría incapacitada por cinco días.
Pasando este tiempo, la joven se presentó al trabajo, pero todavía tenía dolor y su desempeño en el área de cocina fue lento. El 18 de enero pidió permiso para ausentarse porque tenía consulta con el especialista. Ahí le dieron su diagnóstico: “lesión de menisco medial de rodilla derecha” que amerita cirugía para remodelación o sutura meniscal media. Le extendieron su incapacidad por otros ocho días con orden de estudios preoperatorios.
Al siguiente día se presentó al trabajo y Andrea le dijo que tomara sus días de incapacidad sin ningún problema; tendría su pago en su cuenta bancaria.
“El Supremo Café & Tocino” la despidió, pero dicen que ella renunció
El 23 de enero se enteró que la empresa la dio de baja sin informarle algo al respecto, así que un día después acudió para recibir una respuesta. La gerente de deslindó y la envió directamente con una abogada que ya la esperaba para que firmara un documento por “renuncia voluntaria”.
En el mismo documento se especificó que la empresa no se hacía responsable del accidente que sufrió en sus instalaciones. Añadió que no pagaría la operación que tiene un costo de más de 60 mil pesos.
Para la empresa, la lesión se debió “a su afición al deporte” y solo entregaría como liquidación 2 mil 367 pesos.
Laura no firmó la supuesta renuncia, pero ya sabe que están remodelando el área de producción. Además de colocar tapetes antiderrapantes y solicitar papales a sus trabajadores para asegurarlos.
“El Supremo Café & Tocino” tiene sucursales en Huexotitla y en el Centro de la ciudad de Puebla, pero también en Cholula. La joven no especificó en cuál ocurrió; sin embargo, ya le recomendaron presentar una demanda
