Antes de cerrar el 2022, el gobernador Miguel Barbosa puso a tres exfuncionarios priistas y morenovallistas en la mira de las autoridades. Los motivos son desvío de recursos, compras a sobrecosto, saqueo de piezas de arte y corrupción.
Este miércoles el mandatario destapó varios escándalos de corrupción en administraciones anteriores, algunas ya hasta con denuncias de por medio.
Implican al extitular de Salud, Roberto Rivero; al extitular de Desarrollo Rural, Franco Rodríguez; y al exdirector del Colegio de Puebla, Antonio Hernández y Genis.
Con ello, el listado de exfuncionarios con pasado cuestionable va creciendo, con la entrada de tres personajes que incurrieron en actos irregulares para quedarse con recursos.
Los puntos que el gobernador trató fueron: el saqueo de museos de Puebla, la construcción del Hospital del Niño Poblano y el apoyo al campo.
Antonio Hernández y Genis, implicado en robos de museos
Como parte de una revisión interna a la Secretaría de Educación Pública (SEP), se detectó un organismo descentralizado con irregularidades.
El Colegio de Puebla bajo la dirección del priista Antonio Hernández y Genis (2019-2021) permitió la adquisición de artículos artísticos, que acabaron en poder de particulares.
La administración de Rafael Moreno Valle Rosas en su momento le entregó a la institución 350 millones de pesos en 2012, con la que se apropiaron de piezas de museos.
Todo esto se realizó con el conocimiento del exsecretario de Educación Pública, Melitón Lozano Pérez que nunca informó sobre esta situación.
De hecho, Hernández y Genis fue destituido del Colegio de Puebla, en cuyo lugar llegó Yenifer López Guzmán, designada directamente por el gobernador.
No obstante, este perfil está vinculada a América Rosas Tapia, quien la llevó al puesto cuando fue subsecretaría de Educación Superior.
Roberto Rivero Trewartha, “mercenario de la salud” que engañó a los poblanos
Durante la entrega de la unidad de hemodiálisis en el Hospital del Niño Poblano, el doctor José Antonio Martínez García reveló un fraude dentro del proceso de construcción.
El proyecto tenía contemplada una inversión millonaria para una unidad para padecimientos renales, pero el equipo adquirido fue a sobrecosto y no era compatible.
El recurso invertido para esta unidad prácticamente fue “tirado a la basura”, pues la unidad en ningún momento recibió pacientes.
Roberto Ribera Trewartha fue el encargado de supervisar toda la construcción del Hospital del Niño Poblano, entre 2014 y 2015.
Miguel Barbosa indicó que abrirían una investigación para conocer más detalles al respecto y en su caso iniciar procedimientos penales contra los responsables.
Francisco Rodríguez Álvarez, “se clavó” dinero del campo
Barbosa Huerta revivió el nombre de un viejo morenovallista, que lucró con recursos que servirían para ayudar a campesinos, sin embargo, terminó en sus propios bolsillos.
Durante la inauguración de la Expo Navidad, el gobernador hizo referencia al exsecretario de Desarrollo Rural quien malversó fondos que debían llegar a agricultores.
En su momento, al mencionar su nombre alguna de las asistentes al evento inaugural gritó “ratero”, evidenciando la mala imagen que quedó de él.
Hay que recordar que, el excoordinador de campaña de Martha Erika Alonso tiene una orden de aprehensión por haber recibido un título “patito”.
‘Franco’ Rodríguez, hasta el momento ha desaparecido de la vida pública, debido a la persecución que el Gobierno de Puebla inició contra los allegados del morenovallismo.