El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta se manifestó en contra de eliminar la prisión preventiva oficiosa en México, al señalar que se creará una descomposición total dentro de la aplicación de la justicia.
En conferencia de prensa, explicó que en la realidad del país, los delincuentes que reciben dicha medida cautelar siguen cometiendo delitos desde los reclusorios, ahora al eliminarla, infringirán la ley también desde las calles.
Dijo que es complicado crear un proceso penal y encontrar las pruebas para imputar a los maleantes, por ello, será un asunto gravísimo darles más libertad.
“La realidad en nuestro país, es que el presunto delincuente de delitos graves que tiene prisión preventiva oficiosa sigue cometiendo delitos desde el reclusorio. Cuando no les otorguen prisión preventiva van a seguir delinquiendo, vamos a tener afuera a delincuentes que ha sido muy complicado crearles un proceso penal”.
En caso de que se elimine la prisión preventiva oficiosa, será bajo la competencia del Poder Legislativo, pues la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no puede hacerlo.
Barbosa expresó que confía en que la corte tenga la suficiente sabiduría para resolver el tema y no se desarrolle un tribunal ajeno.
Resaltó que igual que el Poder Judicial del Estado, el sistema de justicia federal requiere de una reforma, al tener diversos vicios como el otorgamiento de privilegios a grupos particulares, que haya tribunales controlados por grupos de juristas poderosos y que solo ganen asuntos quienes formen parte de los círculos del poder.
Por el contrario, las personas con bajos recursos nunca tendrán acceso a la justicia y menos, si se enfrentan a asuntos de intereses de elites.
Asimismo, el mandatario acusó que hay jueces federales temerarios con vínculos evidentes que resuelven los casos contra la ley, en favor de personas con comportamientos ilícitos.