El gobernador Miguel Barbosa Huerta anunció una investigación a los prestanombres del exgobernador, Mario Marín Torres, exmandatario de Puebla, ya que a través de ellos posee una fortuna.
Luego de que el expriista envió desde la cárcel una carta en contra del presidente Andrés Manuel López Obrador donde lo acusó de difundir información falsa sobre el dinero que posee él y su familia, el mandatario morenista pidió a Marín Torres que respete al presidente y aclaró que fue el subsecretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana, Ricardo Mejía Berdeja, quien expuso que sus cuentas y del empresario Kamel Nacif Borge fueron descongeladas.
Digo que no sea grosero el chaparrito que respete al presidente”, afirmó en la conferencia de prensa matutina de este lunes.
Advirtió que desde la entidad poblana, se investigará la cantidad de recursos y bienes de las personas que realizaron operaciones financieras en lugar del priista, pero que forman parte de la fortuna de Marín Torres. Aseguró que cada uno está completamente identificado.
Le digo a Marín que vamos a investigar nosotros la fortuna que poseen en sus prestanombres acá en Puebla, sabemos quiénes son y vamos a investigarles”.
La carta de Mario Marín fue enviada desde el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún. El periodista José Luis Candanedo Hernández se encargó de difundirla a través de las redes sociales.
Fue el pasado 2 de septiembre, cuando Mejía Berdeja reveló que se descongelaron las cuentas de Mario Marín y Kamel Nacif por un monto total de 800 millones de pesos.
El exgobernador detenido desde el 3 de febrero de 2021, indicó que lo revelado por el gobierno federal puso en alto riesgo la seguridad e integridad física de su familiar, debido a las expectativas delincuenciales que pudiera generar la información.
Hizo responsable a la administración de López Obrador por cualquier acto que atente en contra de su seguridad e integridad.
Mario Marín fue detenido en Acapulco, Guerrero, acusado de haber ordenado las torturas en contra de la periodista Lydia Cacho en 2005.
El 10 de febrero, un juez dictó auto de formal prisión en su contra y desde entonces se mantiene preso en Cancún. Por este delito aún se encuentran prófugos Kamel Nacif y Adolfo Káram, quien entonces fungía como director de la Policía Judicial.
