El presunto ataque del que fue víctima la diputada federal, Genoveva Huerta me dejó una duda ¿Y las defensoras de mujeres en el PAN?
Es evidente que hay una doble moral en el PAN, perdón por el lugar común.
Hay mujeres panistas que se suben al discurso feminista cuando les conviene.
Los pongo en contexto.
El 5 de septiembre, el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa erró en el uso de un concepto y utilizó la palabra “promiscua” entre los calificativos hacía la dirigente del partido, Augusta Díaz de Rivera.
Lo hizo cuando refería que los panistas habían incurrido en actos anticipados de campaña, al destapar a Eduardo Rivera como candidato a la gubernatura para el 2024.
Los panistas intentaron desviar la atención y, en nado sincronizado, salieron a defender férreamente a Díaz de Rivera.
(Ya saben, en el mundo panista de ultra derecha, cambiar continuamente de pareja es pecado y un insulto. En la actualidad, cada quien hace con su vida sexual lo que se le antoja).
En fin, uno de los tuits que más llamó mi atención fue el de Ana Teresa Aranda. Un tuit que no citaré aquí porque es ofensivo y violento.
Ahora.
Este 11 de septiembre, Genoveva Huerta acusó un acto de violencia en su contra.
Dijo que había sido sacada por la fuerza de la asamblea distrital del PAN en Tlaola. Que la sacaron el alcalde de este municipio y que hasta fue escoltada por la policía municipal.
De ser cierto, como lo dije ayer, el presidente estaría cometiendo un acto gravísimo, pero, además incurriría en violencia política de género.
Él sí, porque con su actuar habría obstaculizado los derechos políticos y partidistas de una mujer.
El caso es que hoy, más de 24 horas después, no hay un solo tuit de “La Doña” ¿Por?
Ni de Ana Teresa Aranda, ni de alguna otra de las mujeres panistas que se rasgaron las vestiduras por su presidenta de partido.
Les doy a la respuesta: No le creen. Ni siquiera le dan el beneficio de la duda. No piden al menos una investigación para saber si en realidad Genoveva Huerta fue violentada.
¿Eso es apoyo a las mujeres?
Peor, muchas militantes promovieron el #GenoMiente para desvirtuar la versión de la diputada federal.
¿Entonces?
Cuando sí hay un posible delito que investigar, se callan. Lo hacen para apoyar un discurso oficial, no la disimulan ni tantito.
Entiendo que duden de lo que sucedió, porque al final Genoveva Huerta resultó electa de una asamblea, pero una investigación sí merece.
Aquí no vale la percepción ni las palabras. Valen los hechos.
Todavía tienen tiempo de salir a defender.
Estaré muy atenta, quiero de verdad leer esa férrea defensa que elucubraron hace apenas unos días.