Sergio Salomón Céspedes fue muy cuidadoso para evitar que su Informe de Labores se viera como un destape descarado. Ni una de las 10 mil personas que se congregaron en el Zócalo de Tepeaca le gritaron “¡Gobernador!”. La forma “sutil” en la que suelen destaparse los políticos de ahora para decir “si el pueblo lo pide…”.
Pero, tampoco somos ingenuos. El informe del presidente del Poder Legislativo y una de las “corcholatas” a la gubernatura de Puebla estuvo lleno de mensajes claros para posicionarse de cara al 2024.
Empecemos por los videos que se trasmitieron en las pantallas gigantes antes de que iniciara formalmente el evento. En los videos salían ciudadanos random hablando de cómo se han beneficiado con las gestiones del legislador, todos terminaban diciendo: “Sergio Salomón es el bueno”.
Sergio Salomón fue cuidadoso y articuló su discurso para transmitir dos mensajes. La continuidad, en el sentido de “no vengo a mejorar lo que ha hecho este gobierno, sino a continuarlo”; y el de la transformación, que es una línea nacional para la elección que se avecina.
Veinte veces reconoció el trabajo del gobernador Miguel Barbosa, para quien estuvieron escrupulosamente dirigidas todas las porras.
Esas fueron las señales en términos de comunicación visual y discurso. Pero hubo otras que usan los políticos para “demostrar el músculo”.
Primero la capacidad de convocatoria: 10 mil personas en el zócalo de Tepeaca, según cifras oficiales, sillas colocadas eran 7 mil y había varios de pie.
Después, por supuesto, la presencia del gobernador Miguel Barbosa quien reconoció al legislador en su discurso. Dicen que en total llegaron 160 presidentes municipales de todo el estado y de todos los partidos políticos.
Entre los que más destacaron el priista, José Luis Márquez, de Zacatlán; y el panista Edmundo Tlatehui, de San Andrés Cholula. También la panista Paola Angón, presidenta de San Pedro Cholula.
Javier Pacheco y su esposa, quienes siempre han sido invitados a los eventos más importantes del gobernador. Hasta los líderes del PRI, Néstor Camarillo y Jorge Estefan Chidiac.
La secretaria General de Morena, Citlali Hernández se interpretó como un respaldo del partido y sus líderes en Puebla, Olga Romero Garci Crespo y el presidente del Consejo, Andrés Villegas.
En entrevista, la secretaria General, se ofreció como mediadora para unir a Morena en Puebla que, en sí solo está dividida por el diputado federal, Ignacio Mier, quien denunció al gobernador Barbosa.
Al final, Sergio Salomón parece tener claras dos cosas. Primero que Morena ha decidido que el candidato será quien mejor posicionado esté en las encuestas, por eso, más allá del discurso y las señales, se ocupó en repetir su nombre una y otra vez.
Segunda, que la unidad es lo más importante, necesita al gobernador, a las otras “corcholatas”, al partido y a todos los alcaldes que pudieran ser afines a su proyecto para ganar.
Sus seguidores dicen que “Sergio Salomón es el bueno, ¿será?”.
Por cierto… en la comida que ofreció después del informe, a la que también llegó el gobernador, el mariachi tocó “El Rey”, la típica canción del destape.