Se acabó el gobierno de López Obrador
Los últimos días del gobierno del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador terminan este lunes 30 de septiembre.
Se fue como el mandatario federal con mayor aprobación de la historia. Según El País, periódico internacional de gran renombre, llegó casi al 80%, una cifra histórica.
López Obrador se fue con importantes triunfos, como un sistema de apoyos en efectivo a un gran número de población que, sí, efectivamente ayudó a disminuir los niveles de pobreza.
Se fue con proyectos como el Tren Maya y Dos Bocas. Con reformas importantísimas como la reestructuración al Poder Judicial, el salario mínimo y la reforma a la Guardia Nacional.
Su gran pendiente, que no pudo completar antes de irse el plan de salud del IMSS Bienestar para que México tuviese un mejor sistema que Dinamarca, como él decía.
Sentó las bases del sistema y veremos con el tiempo si funcionan.
Entre los pendientes entró Puebla con el hospital San Alejandro que aún no está terminado.
El combate a la delincuencia y el crimen organizado tampoco es algo que haya podido contener.
Quedó, aunque lo intentó, resolver la verdad histórica de los 43 de Ayotzinapa, aunque sí hubo avances.
A pesar de que López Obrador fue el principal impulsor de Claudia Sheinbaum para que se convirtiera en la primera presidenta mujer, tampoco se vio empático, en el discurso, de la lucha feminista.
En fin, se va a uno de los presidentes más importantes de la historia de México, altamente aplaudido y con los cimientos de una forma de gobernar que pinta para varios sexenios más.
La clase política más importante del país quedó volcada en Morena o autoexiliada a sabiendas de que, fuera de esta ideología, no volverán a prosperar.
Como él dice “Si hice bien o no, la historia lo dirá”.