Los antibarbosistas se quedaron fuera del Comité de Morena por no saber sumar
Por algo la vida me puso en el oficio del periodismo y me alejó, casi completamente, de las matemáticas. A mí me ponen una cuenta y les juro que no doy una.
Me pasa como a los consejeros afines al diputado Nacho Mier y a Claudia Rivera, que se quedaron fuera del Comité Ejecutivo de Morena por no saber sumar.
Trataré de explicarles, no porque sean incapaces de entender, sino porque la explicación requiere hablar de números.
En el Congreso de Morena, que sucedió el pasado 20 de agosto, los 151 consejeros podrían usar dos votos para la conformación del Comité Ejecutivo Estatal.
Así, en una operación más que pulcra y complicada, se dividieron los barbosistas para votar por sus afines y ganar la mayor cantidad de carteras. En total 8.
Los antibarbosistas, comandados por la diputada local Daniela Mier, tenían una encomienda, llevarse tres secretarías.
Todo iba bien, propusieron la creación de la Secretaría de la Diversidad y la de Juventud, para que en lugar de 8 fueran 10 y así, con sus votos (unos 30 más o menos) mayoritearan para estas carteras.
Sin embargo, a la hora de votar si deberían ser 10 u 8 las secretarías, la mayoría votó solo por 8.
Sus posibilidades fueron menos, se redujeron a apostar por presidir una sola secretaría, pero se atontaron.
Quedaron completamente descolocados cuando se eligió a Olga Romero como dirigente y a Andrés Villegas como presidente del Consejo.
Ya no pudieron organizarse y terminaron completamente fuera del Comité.
Si revisamos las votaciones de los secretarios, todas rondan entre los 29 y 30 votos, sus votos les alcanzaban perfecto para ganar alguna.
¿Qué pasó?
Malgastaron las dos únicas oportunidades de votar en votar por perfiles que no tenían posibilidades de ganar, para intentar demostrar oposición a algunos barbosistas.
Así, a la hora de votar por los suyos, ya no les alcanzaron.
La historia afuera ya la sabemos, los antibarbosistas se salieron muy indignados “porque ya estaba todo planchado”.
Pues, sí qué esperaban. ¡Es política!
Al menos se hubieran echado un cafecito antes del Congreso Estatal para ordenar su votación.
Ni modo, se les fue, y todo por no saber sumar.
Y si Nacho Mier se destapa en su Informe
¿Actos anticipados o una inocente invitación? Es esa la polémica que se ha destapado en torno a la propaganda desplegada en Puebla por parte del diputado federal, Nacho Mier con motivo de su cuarto informe de labores.
La respuesta concreta la tendremos el 27 de agosto, si Nacho Mier se destapa en su informe.
Los pongo en contexto.
El 20 de agosto, el diputado federal plurinominal por Puebla, Nacho Mier desplegó una agresiva campaña en el estado.
La campaña comprende espectaculares y anuncios publicitarios en los puestos de periódico del Centro Histórico de Puebla.
Este lunes, el presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera dijo que los anuncios en el Centro serán retirados pues violentan el Código Reglamentario Municipal (Coremun).
En respuesta, el diputado federal lanzó un video en el que acusa que no se trata de propaganda electoral, sino de una invitación a su Informe de Labores.
Puede ser que, en un análisis jurídico, Mier tenga razón, aunque evidentemente se promueven él y Morena.
Lo que tal vez no se ha dado cuenta el legislador es que solito se está poniendo el pie.
La semana pasada, en su columna “A puerta cerrada”, el periodista Jorge Rodríguez adelantó que Nacho Mier se destaparía en su Informe.
Si esto pasa, entonces se comprobaría que el diputado federal no está invitando a un inocente acto de rendición de cuentas, sino a su destape a la gubernatura de Puebla.
Todo esto, como se los dije al inicio, se resolverá el 27 de agosto.
¿Nacho Mier usará su Informe para destaparse?