Las fotomultas de Morena ascienden a más de 60 mil pesos y los exdirigentes y militantes responsables de estas infracciones se niegan a pagarlas.
Ayer, en Ambas Manos publicamos que durante el proceso de entrega-recepción, que se lleva a cabo en el partido en Puebla, detectaron una serie de irregularidades.
Entre ellas las fotomultas de las camionetas y autos adquiridos ente 2019 y 2020. Bastante polémicos, por cierto.
El parrido compró dos autos y seis camionetas, se gastó casi 4 millones de pesos y fueron criticados, ya saben, por la austeridad republicana.
Compraron Nissan doble cabina, una Urvan para 15 pasajeros y una RAM 1500.
Resulta que estos autos tienen varias fotomultas que, juntas, suman más de 60 mil pesos. La interrogante es ¿Quién paga?
El exdirigente, Aristóteles Belmont se lavó las manos y dijo que el partido es el que debe cubrir los adeudos.
Pero no puede ser así.
Los recursos del partido no pueden ser utilizados para cubrir multas por un uso incorrecto de las unidades. Son los conductores de los autos, quienes rebasaron los límites de velocidad, los que deben cubrir estos pagos.
El problema es que seguramente ni bitácoras de uso deben tener las unidades.
El problema es aún más grande. Con fotomultas los autos no pueden pagar el resto de impuestos que les corresponden.
Así, ahora adeudan Control Vehicular, tenencia y, por supuesto, tampoco les cambiaron las placas.
El informe del PRI
La primera semana de octubre, la fracción parlamentaria del PRI planea hacer su Informe de Labores.
Los diputados locales tienen contemplado invitar a su dirigente nacional y amigo personal de Néstor Camarillo, Alejandro Moreno. Esto pese a las acusaciones en su contra.
Este día, en la comida que tuvieron con el gobernador Miguel Barbosa, también aprovecharon para invitar al mandatario estatal.
¿Es posible que vayan los dos? Puede ser en el contexto de que “Alito” ahora es amigo de Morena e impulsa la reforma a las Fuerzas Armadas.