El periodista Marco Aurelio Ramírez fue ejecutado este 23 de mayo a solo unas cuadras de su casa en Tehuacán, Puebla, de donde era originario.
Aguerrido, investigador e incorruptible, es como lo describen muchos de sus compañeros con quienes convivió durante más de 30 años que ejerció el periodismo.
Uno de los casos más emblemáticos que investigó fue el del cura pederasta, Nicolás Aguilar, acusado de abusar de más de una centena de niños.
Realizó esta investigación junto con Selene Ríos, lo que provocó la realización de su obra que fue publicada de manera póstuma a su muerte en el 2016, “La Desilusión de Dios”.
Aunque Marco Aurelio era funcionario municipal, hoy Artículo 19 y la Red de Periodistas exigen que su asesinato sea investigado con la perspectiva de su labor periodística.
Su ejecución se suma a la de otros dos periodistas este año, Abisaí Pérez Romero, de Hidalgo; y Gerardo Torres Rentería, de Acapulco.
Hoy periodistas de todo el mundo piden justicia para Marco y que se detengan los crímenes contra la prensa en México.
Descanse en paz.
La reunión de la unidad
Nadie se esperaba que la noche de este martes la exalcaldesa de Puebla, Claudia Rivera se reuniera con el gobernador del estado, Sergio Salomón Céspedes.
Rivera no fue solo una de más exiliadas del barbosismo. Tuvo una afrenta directa con el exgobernador de Puebla.
Hoy, sorprendentemente, los números la ponen como una de las mujeres de Morena mejor posicionada a la gubernatura.
El gobernador Sergio Salomón y la exalcdesa tuitearon el encuentro como de unidad.
Unidad en torno al Salomonismo y Morena.
¿Contra?
Ya veremos…