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Priistas dejan solo a Eduardo Rivera tras garantizar cargos

Columna Alfombra Negra.

Foto del columnista Marco A. Mirón Cortés.

En el recuento de daños, la marca PRI le hizo más daño que beneficio al PAN en suelo poblano en la elección del pasado 2 de junio.

Los priistas buscaron su beneficio, como Néstor Camarillo al garantizar su cargo como próximo Senador, dejando a los panistas en el abandono.

La marca PRI fue un lastre más que un apoyo a la alianza opositora en la reciente campaña y Morena lo aprovechó a la perfección.

En el caso de Puebla, Alejandro Armenta Mier, virtual gobernador electo, dirigió en ese sentido su discurso contra su oponente Eduardo Rivera.

Lejos de señalarlo como el panista que encabeza la alianza opositora, Armenta Mier lo encuadró como integrante del PRI. Desde luego, que esa idea penetró en el colectivo que todavía no tenían referencia notable del ex edil capitalino.

Por lo tanto, lejos de representar una ayuda, el Revolucionario Institucional se convirtió en una carga para la campaña de la alianza opositora.

Morena englobó al PRI con la corrupción y lo remarcó en este proceso comicial.

Si le sumamos escándalos como la detención de Tania N, excandidata suplente a diputada local plurinominal, entonces el resultado fue mejor de lo esperado.

La marca PRI, insisto, no abonó positivamente a Eduardo Rivera. La meta de 500 mil sufragios prometidos no fue alcanzada.

La cúpula priista como la actual dirigente estatal y su antecesor, Delfina Pozos y Néstor Camarillo, poco o nada hicieron en campaña.

Y menos en la derrota.

Ninguno ha salido a dar la cara públicamente para expresar los motivos de la derrota.

Solamente en redes sociales, Delfina Pozos reconoció el trabajo hecho en campaña por los integrantes de la alianza Mejor Rumbo para Puebla.

Los motivos o causas de la derrota… ninguna mención. Mejor uso su cuenta de X para cambiar su foto de perfil.

En el caso de Néstor Camarillo, su cuenta X fue para agradecer a quienes votaron a su favor, dejando de lado la derrota de Eduardo Rivera.

Para qué hacerlo, si finalmente tiene garantizado su curul en el Senado de la República. En otras palabras, lo que le importa es su beneficio y no la derrota del 2 de junio.

El PAN debe reconsiderar esta alianza que solamente fue en beneficio de los priistas que ganaron perdiendo.

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@Marcomironc

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