Israel, uno de los principales agresores de la activista Olimpia Coral Melo, ya fue vinculado a proceso por los delitos de ultrajes a la moral, daño en propiedad ajena y lesiones dolosas. Se quedará en prisión mientras dure su proceso jurídico.
Así lo reveló en sus redes sociales la propia impulsora de la Ley Olimpia, quien agradeció el apoyo de todos los colectivos, feministas y ciudadanía. También de su defensa legal y de la Fiscalía General del Estado.
En un primer mensaje, Olimpia Coral mencionó:
Después de una larga audiencia, informo que se vincula a proceso a Israel N. por los delitos de ultrajes a la moral, daño en propiedad ajena y lesiones dolosas. Imponiendo la medida cautelar de prisión preventiva justificada. Gracias a mi defensa @UldisMenaLS y a la Fiscalía”.
Posteriormente, posteó un segundo mensaje en el que refirió: “Lo que nos pasó en Huehuetla el pasado mes de abril fue tormentoso. Claro que da miedo, claro que seguir un proceso no es nada fácil y siempre una se pregunta si habrá consecuencias peores si denuncias. Pero seguimos… ¡Va por todas las que no pudieron hacerlo! Gracias hermanas”.
A Israel lo reaprehendieron e internaron en el Centro de Reinserción Social de Zacatlán la madrugada del pasado sábado, cuando agentes ministeriales lo ubicaron y detuvieron por segunda ocasión.
En abril, los agresores de Olimpia Coral la amenazaron
Ambas Manos informó cuando el 10 de abril del presente año varios hombres, entre ellos Israel, acosaron, amedrentaron y amenazaron a Olimpia y a sus acompañantes, también mujeres.
La agresión ocurrió en una gasolinera sobre la carretera de Huehuetla, cuando las víctimas se encontraban en esa población por una conferencia que iban a impartir precisamente sobre el tema de violencia contra las mujeres.
Al sentirse amenazadas y en un acto de desesperación, Olimpia comenzó a transmitir y pedir ayuda en vivo a través de Facebook, en donde quedó grabado las acciones de amenazas verbales y física de los hombres.
Tras la llegada tardía de elementos policiales, se les pidió a las mujeres acudir a denunciar a Zacatlán y, una vez que estuvieron ahí, las canalizaron hasta la ciudad de Puebla, en un trayecto de viaje de poco más de cuatro horas.
Aunque también a Israel lo detuvieron en ese momento, por policías municipales y estatales, poco después lo liberaron pues solamente un juez calificador le impuso una multa por faltas administrativas.
Esto a pesar de que se tenía conocimiento de que ya estaba siendo denunciado penalmente en la Fiscalía General del Estado.
