Teresa E. es la víctima que denunció a María Hilda N. o Lili Bustillos y gracias a ella hoy la ex Miss Puebla duerme en el Cereso de San Miguel. Tenía solo 16 años de edad y logró escapar luego de dos años y 10 meses.
Este jueves 23 de marzo, en conferencia de prensa, la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE) confirmó que sus agentes capturaron, por segunda ocasión, a Lili Bustillos. Ya fue presentada ante el juez de control y se le formuló imputación por el delito de trata de personas en su modalidad de trabajos forzados.
Sin embargo, la mujer solicitó la duplicidad del término constitucional para resolver su situación legal y será hasta mañana cuando el juez decida si la vincula a proceso o no. Mientras tanto, ordenó su ingreso al penal de la ciudad de Puebla bajo la medida cautelar de prisión preventiva.
Víctima de Lili Bustillos era menor de edad
Margarita Garcidueñas Cuéllar, la fiscal de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres, explicó que fue el 22 de abril de 2022 cuando Teresa E. denunció a Lili Bustillos.
La joven declaró que, en junio de 2019, cuando tenía 16 años, Lili Bustillos le ofreció trabajo en su domicilio para labores domésticas. Ella aceptó sin imaginar lo que le esperaba.
Durante casi tres años, Lili Bustillos la golpeó y quemó dejándole marcas permanentes en su cuerpo; la obligaba a barrer bajo la lluvia, le cortó el cabello y no le daba de comer ni de beber. Además, no le pagó y amenazó con matarla y desaparecerla. También la dejó incomunicada, por lo que no podía pedir auxilio.
Cuando logró escapar, denunció. La FGE realizó diversos actos de investigación, entre ellos: entrevistas a testigos, inspección en el domicilio y dictámenes periciales en materia de medicina forense, psicología, trabajo social, antropología social y victimología. Luego, solicitó y obtuvo la orden de aprehensión en su contra.
Fiscalía presentó queja contra juez que la dejó libre
Agentes ministeriales aprehendieron a Lili Bustillos el pasado 9 de marzo en el estacionamiento del Instituto Oriente, pero en audiencia el juez la dejó en libertad al considerar que hubo violaciones a sus derechos humanos.
Al respecto, el fiscal Gilberto Higuera Bernal, señaló en la misma conferencia que se trató de una resolución equivocada y ya presentaron la respectiva queja ante el Consejo de la Judicatura.
Consideramos que no fue una decisión correcta. Lo más importante, como yo lo señalé, es que íbamos a aprehenderla por segunda ocasión. En una aprehensión no está a debate la detención de una persona ni la forma. La detención se examina cuando es en flagrancia para valorar si es legal o ilegal, toda aprehensión es legal porque es un mandato judicial”, explicó.
Por último, informó que ya se cuenta con la denuncia de otra víctima. Hasta el momento suman dos.