La familia de Rocket, un cachorro de raza pomerania de seis meses de edad, exige justicia luego de que lo robaron en la junta auxiliar de San Francisco Totimehuacan de Puebla capital y lo devolvieron sin vida en una caja a través del servicio de entregas de la plataforma DiDi.
Todo ocurrió el pasado 30 de enero en el barrio de San Miguel. Rocket salió de su hogar sin que sus dueños se dieran cuenta debido a que en el domicilio realizaban trabajos de construcción en una barda.
Cámaras de seguridad captaron el momento en que el cachorro fue levantado por un sujeto que conducía una camioneta blanca de doble cabina.
Al notar la ausencia de su mascota, la familia inició una intensa búsqueda con ayuda de vecinos y cámaras de vigilancia. Gracias a estos videos, lograron identificar la camioneta en la que Rocket fue sustraído.
Román Silva, dueño del perro, relató en entrevista con Ambas Manos que mientras sus vecinos le mostraban los videos, vio pasar la camioneta implicada.
De inmediato le marcó el alto al conductor y lo cuestionó sobre el paradero de su mascota. El hombre respondió que tenía una bodega cerca del lugar.
Dijo que quien manejaba la camioneta el día de los hechos pudo haber sido un trabajador suyo. Por ello se comprometió a investigar y, en caso de que alguien tuviera al perro, devolverlo.
Posteriormente, por la noche, proporcionó el número de teléfono de su cuñado, a quien identificó como la persona que recogió a Rocket.
#VIDEO 🔴 Justicia para Rocket.
— Ambas Manos (@Ambas_Manos) February 3, 2025
Levantan a pomerania en San Francisco Totimehuacan y luego lo regresan muerto en una caja por entregas de Didi. 😭#AmbasManos @_Carbente_ pic.twitter.com/xRLjcpP6Jw
Levantan a un pomerania y lo devuelven muerto a través de DiDi en Puebla
Román contactó al cuñado y este le confirmó que efectivamente había tomado a Rocket. Sin embargo, le notificó que su esposa llevó al perro a una veterinaria, pero ahí fue atacado por un can más grande que lo mató.
Román no creyó en la versión del ataque y exigió la devolución del cuerpo de su mascota. El sujeto accedió, pero le informó que sería hasta el día siguiente.
Así fue, Rocket regresó a su casa muerto, en una caja y a través del servicio de entregas de DiDi.
Al recibir el cadáver de Rocket, su dueño notó que estaba rasurado, ya que su pelaje era largo.
Inmediatamente contactó a su veterinario de confianza, quien descartó que la muerte se debiera a un ataque de otro perro. No presentaba heridas similares a las de una agresión.
En su lugar, el veterinario encontró un orificio en el cuello del animal, lo que llevó a la hipótesis de que intentaron rasurarlo Y, al no poder controlarlo, le habrían suministrado anestesia en exceso, provocándole la muerte.
Según esta versión, para encubrir el error, decidieron realizarle una incisión en el cuello y argumentar que había sido atacado por otro perro.
Román procederá legalmente por maltrato animal para que el caso de Rocket no quede impune. Precisó que más allá del valor económico, era un ser vivo y un miembro de su familia.
Por lo anterior, enviará el cadáver para que se le realice una necropsia. Enfatizó que con la denuncia, el presunto responsable deberá decir a qué estética canina lo llevaron y de esta forma asuman la parte que les toca.