¿Se deben publicar las fotos de las personas fallecidas y que no son identificadas? Los padres de la joven Paulina Camargo, desaparecida desde 2015, consideraron que sí, pues es esencial para que las familias los puedan reclamar.
Este 19 de agosto, los padres de la joven ofrecieron una rueda de prensa para hablar del caso de su hija. También aprovecharon para hacer esta postura, pues es parte del calvario que han sufrido desde que Paulina despareció.
La señora María del Rocío y su esposo Rolando, expresaron con firmeza su desacuerdo con la postura de esas autoridades que critican la publicación en medios de comunicación, de fotografías y detalles explícitos de víctimas de crímenes.
Lejos de revictimizar, consideraron que esta difusión es crucial para ayudar a identificar a personas sin reconocer y acelerar las investigaciones. Con ello, se evita que los cuerpos terminen en fosas comunes.
La familia Camargo, quien siempre que aparece públicamente porta de alguna forma la fotografía de la joven, destacó la importancia de los medios de comunicación para informar y publicar a las víctimas de hechos violentos.
Argumentan que, al compartir las características y vestimenta de las víctimas, se facilita el cruce de información. Esto resulta fundamental en la búsqueda de justicia y en la resolución de estos casos.
Contrario a la opinión de las autoridades, los padres de Paulina resaltan que ocultar esta información solo retrasa las investigaciones y prolonga el sufrimiento de las familias.
Familia de Paulina Camargo están a favor de la difusión de fotos de personas fallecidas
Puntualizaron que incluso las propias autoridades deberían participar activamente en la difusión de estos datos para garantizar que más personas tengan la oportunidad de encontrar a sus seres queridos. Y, así, evitar el olvido de las víctimas en los anfiteatros del país.
Aunque los padres de la joven aluden a los medios de comunicación, también las autoridades podrían publicar las fotografías porque son ellos quienes hacen todos los levantamientos.
Paulina Camargo desapareció en 2015, la última vez que se le vio tomó un taxi con su novio José María N., estaba embarazada de un hijo suyo.
Desde entonces, las autoridades procesaron a José María por presunto homicidio y aborto, cargos de los que lo absolvieron porque no encontraron el cuerpo de la joven. Hoy está a la espera de su sentencia por desaparición de persona.
