Karina intentó matar a puñaladas a su hija de 7 años en el municipio de Chignahuapan. La detuvieron y vincularon a proceso por el delito de feminicidio en grado de tentativa.
El pasado 5 de junio, la niña, cuyo nombre no revelaron, ingresó al Hospital General de Zacatlán con diversas heridas provocadas con un arma punzocortante. Al ver la situación, el personal de inmediato dio aviso a la Fiscalía General del Estado de Puebla (FGE).
Los agentes llegaron al hospital e iniciaron una investigación con enfoque de perspectiva de género y niñez. Realizaron diversos actos como procesamiento del lugar de los hechos, entrevistas a familiares y vecinos, dictámenes periciales en medicina forense y obtención de videos. Esto permitió ubicar a la responsable.
Fue así como se estableció que la víctima presentaba síndrome del niño maltratado y estuvo a punto de ser asesinada por su propia mamá.
Ese 5 de junio, Karina regañó a la niña y la hirió con un objeto punzocortante, dejándola gravemente herida al interior de su domicilio ubicado en el barrio de Teoconchila, Chignahuapan. Solo la cubrió con unas cobijas mientras se desangraba.
Cuando el papá llegó, la llevó de inmediato a un hospital de Chignahuapan; sin embargo, debido a que su estado de salud era grave, la trasladaron al Hospital General de Zacatlán.
El 7 de junio, la FGE obtuvo la orden de aprehensión en contra de Karina N. La detuvieron dos días después en inmediaciones del Centro de Chignahuapan.
Fue el pasado 12 de junio cuando un juez de control vinculó a la mujer a proceso por el delito de feminicidio en grado de tentativa. Además, le impuso la medida cautelar de prisión preventiva oficiosa, por lo que deberá permanecer en prisión. El plazo para la investigación complementaria es de tres meses.