La Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla aprehendió por segunda ocasión a Ramón N., quien en 2020 violó y embarazó a su hijastra de entonces 14 años. Tuvieron que volverlo a detener porque un juez lo dejó en libertad al considerar que no se trató de una violación, sino estupro.
Miriam Vázquez, expareja de Ramón y madre de la víctima, exigió al Poder Judicial de Puebla que esta vez sí lo vinculen a proceso por el delito de violación. Y es que después de la agresión sexual, amenazó a la adolescente para que no dijera nada. Luego se la llevó junto a sus otras dos hijas, también menores de edad.
Sin dar más detalles, la FGE dijo que realizó actos de investigación. Fue así que acreditó su probable responsabilidad, por lo que solicitó, obtuvo y dio cumplimiento a la orden de aprehensión. Ramón N. ya está a disposición del juez que lo requirió.
Liberación de Ramón N. puso en la mira a dos jueces
Cuando Ramón N. fue liberado y la Fiscalía de Puebla se pronunció al respecto dos jueces del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) estuvieron en la mira.
Uno fue su hermano, Celestino Martínez Bones, Juez de Oralidad Penal y Ejecución del Sistema Acusatorio Adversarial de la Región Judicial Norte, con sede en Zacatlán. El otro fue Lucio León Mata, también Juez de Oralidad Penal y Ejecución de la Región Judicial Norte, pero con sede en Huauchinango.
Este último reclasificó el delito de violación agravada a estupro para que el imputado no pisara la cárcel. Le permitió seguir su proceso en libertad, solo con firma periódica como medida cautelar.
¿Cómo ocurrieron las cosas?
Miriam vivía en un domicilio ubicado en el municipio de Huauchinango con su pareja sentimental, Ramón N y sus dos hijas. Andrea solo era hija de ella mientras que, a Ximena, de 8 años, la procrearon juntos.
En 2020, Ramón violó a su hijastra y la embarazó. La menor dio a luz a una bebé que actualmente tiene poco más de un año de edad.
Cuando Miriam lo denunció por violación, este sujeto se llevó del domicilio a las tres mujeres y vivió con ellas en varios estados del país. En su momento, la madre de las menores intentó denunciar la desaparición. Sin embargo, reveló que nunca se inició la investigación bajo el argumento de que Ximena y la bebé estaban con su padre.
Agentes adscritos a la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Violencia de Género contra las Mujeres solicitaron y obtuvieron una orden de aprehensión en contra de Ramón por violación agravada. Dos años después de lo sucedido, fue detenido, pero de inmediato recuperó su libertad.