Adrián López Cavita, el exdirector de la Policía Estatal atacado a balazos la semana pasada en la colonia América Norte, llevaba 400 pesos en efectivo.
Las autoridades ministeriales investigan la procedencia de dicho dinero y tienen, al menos, tres líneas de investigación del atentado.
Una de ellas es intento de asalto por los 400 mil pesos en efectivo que llevaba. Y que, probablemente, alguien sabía.
Otra apunta a una posible venganza de grupos policiales corruptos que trataron de silenciarlo.
El tercer móvil es el cumplimiento de amenazas del grupo “Operativa Barredora” que en al menos dos ocasiones lo nombró en narcomantas. Las cuales fueron dejadas junto a los cadáveres de otros uniformados dedicados a actividades delictivas como el robo de transporte con mercancía.
Entre ellos el mando Adán Montes y el mismo Alejandro alias “El Tiburón”. Esta línea es, probablemente, la más acertada.
Al exdirector de la Policía Estatal le preocupaban más los 400 mil pesos que su salud
Ambas Manos informó en vivo desde el lugar del ataque la noche del pasado jueves 14 de noviembre en la gasolinera Pemex de la 14 Oriente y privada Río de Janeiro.
Adrián había salido de trabajar y se dirigía a su domicilio, pero decidió pasar a cargar gasolina con su Volkswagen tipo Jetta, A6, de color blanco y placas de Puebla.
Apenas iba a estacionarse en una de las bombas cuando desconocidos, desde un auto Chevrolet, tipo Camaro, de color rojo, se le emparejaron y le dispararon en repetidas ocasiones. Luego escaparon rumbo a la federal a Tehuacán.
La víctima recibió seis disparos en el cuerpo, por lo que grave fue trasladado de urgencia al hospital del Issstep.
Trascendió que al momento de ser auxiliado, pese a su gravedad, Adrián no dejaba de preguntar por una maleta que llevaba y que no perdió de vista en ningún momento.
Ahora se sabe que después de hacer la entrega de sus pertenencias en el hospital, se reportó que llevaba 400 mil pesos en efectivo.
El que portara esa cantidad de efectivo inicialmente hizo pensar que posiblemente intentaron asaltarlo.
Una venganza, otras de las líneas de investigación
Sin embargo, existen otras posibilidades de que también se haya tratado de una venganza.
Por una parte, sería un ajuste de cuentas entre elementos de la Policía Estatal, quienes estarían relacionados en actividades de corrupción.
Por otro lado, se sugiere que algún grupo delictivo como “La Operativa Barredora” estuviera detrás del atentado.
Esto debido a que su nombre apareció en narcomantas dejadas a uniformados asesinados por estar presuntamente vinculados con grupos delictivos.
Entre ellos Adán Montes y Alejandro “El Tiburón”, las cuales fueron firmadas directamente por el Grupo de Operaciones del Señor Mencho (GOEM). Un brazo armado del CJNG y al cual sirve “La Barredora”.
Esta última línea tiene más posibilidades, debido a que con el monitoreo de cámaras de videovigilancia se detectó que, además del Camaro, participó otro vehículo.
Se trata de una camioneta Honda, HRV, gris, a la cual se les ve subirse portando armas largas. Esta camioneta es similar a la que usa “La Barredora” en sus ataques y levantones.
No obstante, de esas tres posibles líneas de investigación, fuentes de inteligencia federal revelaron a Ambas Manos que la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla indaga el origen del dinero que trasladaba Cavita. Y es que no dudan en que podría tener un origen irregular.
En su momento, López Cavita, quien aún es policía activo en la Policía Estatal, fue señalado de tener nexos con grupos criminales dedicados al robo de transporte de carga y al tráfico de migrantes.
También se le ventiló como el mando que recibía y entregaba pagos de miles de pesos para poder operar con el robo de hidrocarburo en el municipio de Tepeaca.
Se sabe que Adrián aún se encuentra delicado de salud, pero ya estable.
