María, nombre ficticio utilizado en esta publicación, tiene 14 años y su abuelo le quemó las manos en un comal, por lo que el DIF de Puebla ya presentó la denuncia contra el agresor.
María debería estar en la escuela, disfrutando su etapa de adolescente con sus amigos y amigas, pero lamentablemente no es así. Hace unos días escapó de su casa porque es víctima de violencia infantil. Hoy, se encuentra hospitalizada porque su abuelo, a quien ella llama “papá”, le quemó las manos en un comal.
La menor no vive con sus padres y el pasado viernes 26 de febrero huyó de un domicilio ubicado en la colonia El Arenal, de la junta auxiliar de San Salvador Chachapa, Amozoc. No lo hizo por diversión, mucho menos para irse con el novio.
María llevaba las palmas de sus manos totalmente quemadas. Dijo que su abuelo la castigó y las colocó en un comal. Esto no es un castigo, es violencia.
A María, le quemaron las manos en un comal y huye en Amozoc, Puebla
La adolescente llevaba chanclas, pero aun así caminó lo más que pudo hasta que la sed la obligo a detenerse en una tienda para pidió agua. El encargado se dio cuenta de las quemaduras; sin embargo, no dijo nada. María tomó agua y se retiró.
Más tarde regresó para pedir alimentos y fue entonces cuando el tendero decidió dar aviso a las autoridades. María refirió que no vivía con sus padres y contó lo sucedido, pero también suplicó para que no la llevaran de vuelta a esa casa.
Cuando la noticia corrió en redes sociales, el DIF estatal tomó conocimiento del maltrato. María fue atendida por el Departamento de Clínicas de Prevención y Atención al Maltrato adscrito a la Procuraduría de Protección de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes.
Posteriormente la trasladaron al área de Quemados del Hospital para el Niño Poblano, donde recibe atención médica.
El DIF informó que ya presentó la denuncia correspondiente ante la Fiscalía Especializada en Investigación de Delitos de Género contra las Mujeres y brindará todo el apoyo jurídico, médico y psicológico a la menor.