La mañana de este domingo abandonaron una camioneta con restos humanos a respaldos del mercado Hidalgo, en la colonia La Loma de la ciudad de Puebla.
Todo indica que la camioneta es propiedad de Fernanda, la novia de César Eduardo, el levantado del bar “Mochomos”. Además, debido a que los restos estaban al interior de bolsas negras, no se sabe exactamente cuántos cuerpos hay.
Fueron algunos vecinos de la calle 23 Norte, esquina con 66 Poniente, quienes alertaron a los números de emergencia. Mencionaron que, desde la madrugada, afuera de la tienda 3B, estaba una camioneta marca Kia, tipo Seltos, negra, con placas del Estado de México. En su interior se observaban bultos en forma humana.
Al lugar acudieron elementos de la Policía Municipal y confirmaron el reporte, por lo que acordonaron el lugar y dieron parte a las autoridades ministeriales.
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— Ambas Manos (@Ambas_Manos) September 22, 2024
Más tarde se presentaron peritos en criminalística y agentes ministeriales de la Fiscalía General del Estado (FGE) asignados a la Coordinación General Especializada en la Investigación de Homicidios Dolosos.
Ellos se encargaron de realizar las diligencias del levantamiento de los restos humanos y asegurar los indicios como es la camioneta Kia. Sin embargo, se desconoce cuántos cuerpos había, pues se llevaron el vehículo a sus instalaciones para hacer el análisis con más discreción.
En la camioneta con restos humanos en el mercado Hidalgo había un mensaje
Fuentes extraoficiales indicaron a Ambas Manos que sobre los restos había una cartulina con el siguiente mensaje:
Así terminarán todos los ratas, secuestradores, robo de carga, extorsionadores y todos aquellos que de hagan pasar por el CJNG”.
También se va a indagar si la Seltos es propiedad de Fernanda, la novia de César Eduardo, joven veracruzano levantado el 8 de septiembre en el bar “Mochomos”. Sólo un día después, apareció desmembrado dentro de un Aveo que incendiaron afuera del Complejo Metropolitano de Seguridad Pública (C5). Tenía un mensaje amenazador, junto a una hielera que contenía su cabeza.
César Eduardo era investigado por su presunta relación con bandas dedicadas al robo de transporte de carga, reveló más adelante la FGE.
