Era la una de la tarde del martes 4 de julio cuando un comandante informó a la base de la Policía Estatal de Chilchotla que pobladores de Xacaxomulco retuvieron a cuatro compañeros durante la elección del juez de paz. En ese momento, se hablaba que un policía municipal había muerto. Esta es la crónica de la revuelta en Quimixtlán. 

En esa comunidad no hay señal de celular, así que era complicado confirmar la información. No había un policía muerto, pero estaba ocurriendo algo mucho peor. 

Juan Carlos Romero, el director de Obras del ayuntamiento de Quimixtlán, fue la única persona que estuvo en comunicación con las autoridades. Tan solo media hora después de que la Policía Estatal recibió el reporte, él prácticamente confirmó que ya estaban muertos dos pobladores.  

El edil José Martínez Pimentel nunca contestó las llamadas. 

Minutos después, Juan Carlos Romero informó que se contactó con Gaudencio García Nava, el secretario General del Ayuntamiento y le dijo que estaba herido de bala, pero lograron rescatarlo y ya estaba recibiendo atención. 

La información caía a cuentagotas, ya eran casi las tres de la tarde y ni la Secretaría de Seguridad Pública del Estado de Puebla (SSP) ni el gobierno sabían bien qué era lo que estaba sucediendo.  

Sin embargo, todo empeoraba. Cuando el director de Obras se volvió a comunicar fue para advertir que los pobladores de Xacoxomulco se estaban reuniendo. Su intención era trasladarse a la cabecera municipal y quemar la presidencia. 

Ya no había tiempo, pero mientras la SSP se coordinaba con la Fiscalía General del Estado (FGE) para ingresar al municipio, un oficial de la Policía Estatal dijo que él logró escapar. Pero unas 300 personas retuvieron a tres de sus compañeros. 

Ya eran las cuatro de la tarde. Para poder hacer frente a la población se reunieron cientos de elementos de todas las regiones posibles: Teziutlán, Tepeaca, Tehuacán, Ajalpan, Ciudad Serdán, Huauchinango, Zacatlán y Atlixco. 

Crónica de la revuelta en Quimixtlán: retienen a maestras y a la hija del homicida 

Cuando la fuerza de la Policía Estatal estaba por ingresar, el director de Obras se volvió a comunicar. para informar que en la presidencia auxiliar tenían a una maestra con alumnos. 

A Guadalupe Victoria llegaron también aproximadamente 30 elementos del Ejército Mexicano. En el hospital de este municipio encontraron a un trabajador de Protección Civil de Quimixtlán. 

Ya eran las cinco de la tarde y fue hasta entonces el funcionario les explicó lo que había ocurrido: se estaban realizando las elecciones del juez de paz cuando un hombre, al ver que iba perdiendo su favorito, sacó una ametralladora y comenzó a disparar.  

Esta misma persona les confirmó que tenían retenidos a cinco maestros y a una niña, la hija del hombre que disparó. 

A esas alturas no se sabía a ciencia cierta el número de muertos y heridos, tampoco en qué condiciones se encontraban los policías retenidos. Solo se tenía el nombre de la persona que disparó: Higinio B. Además, se identificaron a dos incitadores: Esequiel R. alias “El Cheke” y una señora de nombre Felicitas.  

Poco antes de las seis de la tarde, los delegados se acercaron a la base de operaciones para ingresar a la comunidad y rescatar tanto a los compañeros como a los maestros y la niña. 

Media horas después, ingresaron solo unos 30 policías. Lograron que entregaran a la niña y a un familiar. 

Después entraron los delegados de la Sebog de Libres y Ciudad Serdán. Confirmaron el fallecimiento de dos hombres: Manuel F., quien perdió la vida en el hospital de Huatusco Veracruz y Román F. quien murió en el lugar y ya estaba siendo velado por su familia. 

La población señaló nuevamente e Higinio B. como responsables, además, a Enrique B. y Alejandro B., originarios de la misma comunidad. 

Golpean a policías

Para ese entonces ya eran 200 pobladores reunidos, pero los policías seguían retenidos. Estaban en la comandancia, pero no solo había tres estatales, sino también tres municipales. 

Ya por la noche los policías estaban golpeados y no permitían su extracción.  

La situación nuevamente se puso violenta, los delegados eran amenazados con ser linchados.  

La negociación para liberar a los policías continuó hasta que cerca de las 11 de la noche los pobladores permitieron que ingresara una ambulancia a valorarlos. Sí estaban golpeados, pero no requirieron hospitalización.  

Los inconformes poco a poco se fueron retirando del lugar, para la medianoche ya había menos de 100. Querían que los policías aseguraran el domicilio de los hombres que dispararon y exigieron mayor seguridad. 

Fue poco antes de la una de la mañana, ya de este miércoles 5 de julio, cuando la ambulancia se retiró de la comunidad con los seis policías. Por cierto, solo uno de los tres municipales estaba acreditado. 

La Policía Estatal y la Segob acordaron dejar dos grupos para vigilar la zona, pues se respiraba tensa calma. La FGE se quedó en el sitio levantando denuncias y haciendo lo correspondiente.  

Los responsables de todo este alboroto se dieron a la fuga…  

Sergio Salomón cita a alcalde de Quimixtlán

Por su parte, en entrevista este miércoles, el gobernador Sergio Salomón Céspedes dijo que citó al alcalde de Quimixtlán, José Martínez Pimentel, para que rinda cuentas.

El mandatario reprochó el comportamiento de los pobladores, que se quejaban por la reelección de un juez de paz. Al respecto pidió que se presenten denuncias contra los agresores.

Es lamentable, se ha mandado a traer al presidente para que pueda dar cuentas exactas de los sucede, e ir hasta las últimas consecuencias contra los responsables”, dijo.

El pronunciamiento del mandatario fue en favor de esperar a que la FGE haga las investigaciones y saque las conclusiones respectivas.

Por su parte, Daniel Iván Cruz, secretario de Seguridad Pública (SSP), dijo que los elementos involucrados en este asunto no sufrieron daños graves.

También ya presentaron la denuncia contra los posibles responsables de privar de la libertad a elementos de la policía y asesinar a dos hombres.

Con información de Iván Reyes

Buen fin Viaja a CDMX
Magarely Hernández López

Magarely Hernández

Licenciada en Periodismo por el Centro de Estudios Universitarios PART. Reportera desde 2017 en temas de seguridad, feminicidios y desapariciones.