¿Estás pensando en ir a pasear este Día de Muertos al municipio de Zacatlán? Aquí te sugerimos algunas actividades que puedes hacer en un viaje exprés.
Ambas Manos viajó al Pueblo Mágico de la Sierra Norte de Puebla para vivir de cerca el Festival de los Muertos 2024.
Está festividad por el Día de Muertos reúne tres ferias gastronómicas durante el mes de noviembre en Zacatlán: la Feria del Pan de Queso, la Feria del Mole Poblano y la Feria de la Sidra.
Las actividades se llevarán a cabo hasta el 17 de noviembre y el programa incluye recorridos por los altares de muertos en el Palacio Municipal y los panteones.
Si quieres vivir la experiencia llena de tradición e historia conociendo los atractivos de Zacatlán, checa esta guía de Día de Muertos.
Guía de Día de Muertos en Zacatlán
El día no puede iniciar sin un buen desayuno, nosotros te sugerimos visitar Gula Gula, un restaurante ubicado al borde de la Barranca de los Jilgueros.
El ambiente es pintoresco y tradicional que hace sentir como en casa a los comensales y su rico menú incluye los platillos de la temporada.
A nosotros nos ofrecieron un desayuno con plato de fruta, huevos estilo zacateco (revueltos con salsa morita), tortillas y frijolitos. Para acompañar y bajar la comida, un rico cafecito hecho con granos de café local.
Los desayunos se ofrecen de 9:00 a 12:00 horas y puedes elegir entre huevos al gusto, enmoladas, enfrijoladas, chilaquiles y molletes.
Para la hora de la comida cuentan con ensaladas, tacos de arrachera, cositas para el antojo, postres y bebidas muy ricas.
Antes de irte, no olvides tomarte una fotografía en su balcón con vista panorámica hacia la barranca llena de naturaleza y vegetación.
Al salir, sigue colina arriba hasta encontrar el corredor de la Barranca de los Jilgueros, una formación de más de 3 mil 700 metros de profundidad y 7 kilómetros de largo.
A lo lejos se puede observar la cascada Tres Marías, así como cabañas y la tirolesa más larga del estado, para todos aquellos que no le tienen miedo a las alturas.
Más adelante encontrarás el famoso Mirador de Cristal para tomar las fotos más impresionantes desde las alturas del municipio.
Las paredes del Panteón Municipal destellan gracias a los vitromurales hechos por artistas locales en los que se refleja la historia y tradición de Zacatlán.
A lo largo de más de 5 kilómetros, plasmaron su creatividad utilizando una técnica especial heredada por el artista Dick Davis.
En 2011, comenzaron el proyecto en el destacan la producción de manzana, las comunidades y los rostros de la gente de la región.
La primera etapa tomó alrededor de seis meses y actualmente se ha ido enriqueciendo gracias a la intervención de los zacatecos.
Una de las personalidades de Zacatlán es Tachito, un fruticultor de manzana de la comunidad de Popotohuilco que solía comercializar su producción en la ciudad. Del otro extremo le acompaña su esposa Tachita.
La naturaleza y recursos naturales que abundan, su emblemático Palacio Municipal, sus cascadas, el pasado prehispánico, creencias y leyendas también forman parte de estos mosaicos.
El recorrido continúa sobre la avenida Porfirio Díaz donde también se exhiben murales con temática religiosa. Entre ellas el nacimiento de Jesús y Adán y Eva en el paraíso.
Dos calles más adelante encontrarás los vitromurales “México lindo y querido” y “Zacatlán de mis recuerdos”. El primer espacio está dedicado a la vestimenta típica de los 32 estados del país.
Mientras que cruzando la calle, las obras enaltecen la historia de la ciudad, sus tradiciones, sus calles, arquitectura y las culturas originarias que son parte de la identidad de los zacatecos.
En tu visita no puede faltar Relojes Centenario, una de las empresas más antiguas de relojes de Puebla y todo México. Actualmente es considerada la primera fábrica de relojes monumentales en América Latina.
Su fundación se remonta a 1918 y hasta 2023 ha fabricado más de 12 mil relojes monumentales. Los cuales se han instalado en iglesias, palacios municipales, edificios de gobierno, torres, centros comerciales, hoteles y otros lugares.
Algunos de los más conocidos son el reloj de la iglesia de Santiago Apóstol en Chignahuapan; el instalado en la ciudad de Libres y fueron los encargados de restaurar el reloj de El Gallito en el Paseo Bravo de la capital poblana.
Aquí podrás conocer el proceso de fabricación artesanal de cada aparato, los mecanismos que se esconden detrás de cada reloj y mucho más.
También se incluye el acceso al Museo Alberto Olvera Hernández, el fundador de Relojes Centenario. Su legado ha sido preservado a lo largo de 90 años y por tres generaciones de la familia que han dedicado su vida a este lugar.
Al final encontrarás una tienda de regalos para comprar souvenirs a tus seres queridos. Si tienes suerte, podrás admirar el show de Autómatas que funcionan con el mismo mecanismo que usan los relojes.