El Ayuntamiento de Puebla derribará 11 palmeras muertas en el Parque Paseo Nicolás Bravo debido a que representan un riesgo para quienes transitan por la zona.
La Secretaría de Medio Ambiente informó que el objetivo del derribo es garantizar la seguridad de los habitantes y la conservación en la demarcación.
Los ejemplares se restituirán de manera inmediata en cumplimiento a los lineamientos ambientales y bajo supervisión de especialistas. Las nuevas plantas serán árboles jóvenes de entre 3.5 y 4 metros de altura.
Medio Ambiente explicó que la selección de estas nuevas especies que restituirán a las palmeras del Paseo Bravo se ha realizado conforme a la paleta vegetal recomendada para el estado de Puebla. Así, se garantiza la adaptación al entorno y se contribuye al equilibrio ecológico del parque.
La dependencia reafirmó el compromiso con la conservación del arbolado urbano. El cual es una prioridad y forma parte de un plan integral para fortalecer las áreas verdes de la ciudad. Además, genera espacios más seguros y sustentables para todos.
Desde el año pasado la administración municipal comenzó con el derribo de palmeras que se encontraban muertas en pie. Es decir, en cualquier momento podían caer generando repercusiones en los peatones o automovilistas.
Tan solo en la colonia La Paz se determinó el retiro de 30 ejemplares en sitios como la Avenida Teziutlán Norte-Sur. Esta acción se replicó en el bulevar 5 de Mayo.
Y es que transeúntes han reportado en diferentes zonas de la ciudad palmeras en mal estado. Entre ellas en el bulevar Hermanos Serdán, donde han caído ramas secas.
Respecto al Paseo Bravo, el pasado 4 de febrero, el gobernador Alejandro Armenta, anunció, nuevamente la rehabilitación del Paseo Bravo y un Salón de la Fama Deportiva. No dio más detalles.
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