De derretirse, el hielo de Groenlandia elevará 25 centímetros el nivel del mar, indicó un estudio hecho por glaciólogos expertos en el tema.
De acuerdo con AP, el estudio publicado en la revista Nature Climate Change esto sería resultado del cambio climático.
A cargo de Jason Box, glaciólogo del Servicio Geológico de Dinamarca y Groenlandia indicó que esta predicción “es como tener un pie en la tumba”.
Junto a su compañero William Colgan, también glaciólogo, reconocieron que el llamado “hielo zombie”, la gigantesca capa de hielo en Groenlandia elevará el nivel del mar al menos 25 centímetros.
Este tipo de hielo que a decir de los expertos está “condenado a derretirse” está unido a capas más gruesas, pero ya no crece ni se extiende con ayuda de otros glaciares.
Atribuyeron el derretimiento de los glaciares al cambio climático y señalaron que es casi inevitable lo que pasará en algunos años en el futuro.
“Es hielo muerto. Se va a derretir y desaparecerá de la plataforma de hielo. Este hielo ha sido consignado al océano, sin importar el escenario climático que adoptemos” dijo William Cogan, coautor del estudio.
La agencia de noticias indica que los 25 centímetros marcados en el estudio son más del doble del incremento que los científicos habían predecido hace unos años como resultado del derretimiento en Groenlandia.
Señalaron que el aumento podría alcanzar los 76 centímetros. Los resultados contrastan con el reporte del año pasado del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático.
En 2021, los científicos proyectaron que el posible incremento del nivel del mar por el derretimiento de hielo en Groenlandia alcanzaría entre 5 y 13 centímetros para el año 2100.
“Mencionaron que más de 110 billones de toneladas de hielo están “condenadas a derretirse” como resultado de la incapacidad de la plataforma de hielo para reabastecer sus orillas. Cuando ese hielo se derrita, si sólo se concentrará sobre Estados Unidos, tendría una profundidad de 11 metros” explicaron.
Tras analizar el equilibrio del hielo, encontraron que la caída de nieve en las montañas de Groenlandia engrosa los glaciares.
Sin embargo, en los últimos años se ha registrado menos reabastecimiento y mayor derretimiento, generando un desequilibrio.