El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no vio bien que la esposa de un gobernador, como el caso de Rosario Orozco, quiera llegar a un puesto de poder.
En la mañanera en Palacio Nacional, al Ejecutivo se le preguntó por el caso de Manuela Obrador, quien es su primera hermana y quien quiere ser gobernadora de Chiapas.
El Ejecutivo consideró que no debería de participar para no establecer la mala costumbre del nepotismo.
Incluso, mencionó que “poner a las esposas” de los altos funcionarios es “llegar a un extremo.
De fondo, sonó la voz de un reportero diciendo que en se quiere hacer eso. Aunque López Obrador no le contestó directamente, sí dijo: “eso no se puede permitir”.
Aprovechó para agradecer a su esposa Beatriz Gutiérrez Müller, académica en la Benemérita Universidad de Puebla (BUAP) que no quiso ser primera dama.
“No debe inmiscuirse la familia”: AMLO sobre que la esposa de un gobernador llegue al cargo
Con un claro “no debe de inmiscuirse la familia”, el presidente no vio con buenos ojos que los familiares de gobernantes busquen relevarlos.
Recordó que quien aspire a ser candidato no puede tener un cargo en el gobierno pues no es un asunto moral, sino legal.
Luego de que Morena anunció su convocatoria para el o la candidata a la gubernatura de Puebla, sorprendió que Rosario Orozco levantó la mano.
Ella fue esposa de Miguel Barbosa Huerta, quien murió en diciembre de 2024 tras un infarto. Fue precisamente después de su muerte que ofreció, por primera vez, un discurso público.
Otros que se anotaron en la contienda interna de Morena son el senador Alejandro Armenta y la secretaria de Bienestar del estado, Liz Sánchez. Ambos ya anunciaron que renunciarán a sus cargos en pro de la equidad, aunque la convocatoria no los obliga.
En tanto, Julio Huerta, Olivia Salomón y Rosario Orozco no tienen cargo.
Además, el diputado federal, Nacho Mier, buscará quedarse como legislador y al mismo tiempo participar en la contienda interna.