Nuevamente, los primos y aspirantes a la gubernatura de Puebla, el senador Alejandro Armenta y el diputado federal Nacho Mier tuvieron un encontronazo, pues el primero invitó al segundo a someterse a una prueba de polígrafo.
Lo anterior, en rueda de prensa, en la que comentó que la prueba de polígrafo podrá detectar si alguien miente o no.
El presidente de la Mesa Directiva del Senado busca que con esta prueba se sepa quién ha modificado o “cuchareado” una encuesta, rumbo a las elecciones de 2024. La invitación fue para todos los aspirantes.
Me someto al polígrafo o a cualquier tipo de investigación o sustancia, investigación psicométrica”, dijo Armenta.
Aseguró que en su vida pública nunca ha pedido a una empresa que hace estudios demoscópicos que altere alguna encuesta.
En cambio, dijo que “quienes contratan” estos servicios “probablemente” cuando publican encuestas “las pueden alterar”.
Nacho Mier rechaza someterse al polígrafo para demostrar que no ha alterado las encuestas
En respuesta, el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara de Diputados, Nacho Mier, pidió seriedad y reiteró que él no contrata encuestadoras.
La encuesta que vale se va a hacer después de que termine el proceso estatal, las mías me sirven para planear el trabajo individual”.
Pidió que más allá de pedir pruebas de polígrafo, Armenta haga un pacto con el pueblo, realice asambleas y no haga acuerdos cupulares. Dijo que las encuestas son una pérdida de tiempo y prefiere hacer visitas casa por casa.
El pasado 19 de junio, los primos Mier protagonizaron otro encontronazo, el motivo también fueron dos encuestas.
La primera medición fue de Parametría, que colocó al líder del Senado, Alejandro Armenta, arriba —como sucede en todos los sondeos—. Incluso, puso al exsecretario de Gobernación, Julio Huerta, a solo tres puntos de Nacho Mier.
Mientras que otra encuesta del Centro de Estudios Estratégicos en Opinión Pública, de Jesús Medina, colocó a ambos en un empate en el nivel de conocimiento. Dicha medición fue difundida por el equipo del diputado.