Por primera vez se realizó en México el Simposio Internacional sobre Interacciones de Rayos Cósmicos de Muy Alta Energía en la participaron investigadores de la BUAP.
Investigadores de la Facultad de Ciencias Físico Matemáticas de la BUAP impartieron conferencias en el 22 Simposio Internacional sobre Interacciones de Rayos Cósmicos de Muy Alta Energía (ISVHECRI, por sus siglas en inglés), en el cual dieron a conocer sus colaboraciones en los experimentos CMS (Compact Moun Solenoid) y ALICE (A Large Ion Collider Experiment), ambos instalados en el Gran Colisionador de Hadrones (LHC, por sus siglas en inglés), donde los científicos recrean las condiciones del Universo primitivo al chocar partículas a velocidades cercanas a las de la luz.
Después del International Cosmic Ray Conference (ICRC, por sus siglas en inglés), el ISVHECRI es el segundo evento más importante en el tema de rayos cósmicos de muy alta energía.
Ambos están patrocinados por la Comisión de Física de Astropartículas de la Unión Internacional de Física Pura y Aplicada (IUPAP), presidida por el profesor Takaaki Kajita de la Universidad de Tokyo y Premio Nobel de Física en 2015.
Más de un centenar asistieron a simposio de rayos cósmicos
Por primera vez este simposio se realizó en México, en el mes de julio en Puerto Vallarta, con más de 100 participantes de 20 países. Su objetivo fue proporcionar un foro para discutir interacciones de muy alta energía para la interpretación de datos de rayos cósmicos, basados en la información disponible de experimentos con aceleradores y de rayos cósmicos.
La doctora María Isabel Pedraza Morales explicó cómo el experimento CMS ayuda a entender las “lluvias” de partículas producidas cuando los rayos cósmicos chocan con la atmósfera. Al estudiar estas colisiones, los científicos esperan descubrir más datos sobre el origen de estas partículas que llegan del espacio.
Por su parte, el doctor Mario Rodríguez Cahuantzi habló sobre cómo el experimento ALICE resuelve un gran misterio de la Física: por qué hay más muones (partículas parecidas a los electrones, pero mucho más pesadas) de los predichos en las “lluvias” de partículas cósmicas. Los resultados de ALICE sugieren que la clave podría estar en un estado de la materia similar al que existía al principio del Universo.
Los investigadores de la BUAP desempeñan un papel clave en estos experimentos, con el desarrollo de nuevas tecnologías y el análisis de los datos obtenidos. Así, la investigación en Física de Partículas no sólo permite conocer el origen del Universo, sino también contribuye al progreso de la sociedad.