En ciencia, sólo uno de cada cinco países ha logrado la paridad de género, por lo que se requiere mucho trabajo en los entornos educativo y familiar para superar las desigualdades.
En las últimas tres décadas hay un incremento gradual y constante de las mujeres en el Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
Para 1991 representaban el 21 por ciento, en 2024 su participación es de casi 38 por ciento. Sin embargo, estos logros no son fáciles, en todos los niveles y ámbitos las mujeres han tenido que librar obstáculos. Además de demostrar valor y voluntad, subrayó la rectora María Lilia Cedillo Ramírez, durante la Feria conmemorativa del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
Al impartir la conferencia “Mujeres en la ciencia”, con la cual inauguró esta jornada realizada en la Facultad de Ingeniería, la doctora Cedillo afirmó que se requiere mucho trabajo por parte de las instituciones para cerrar la brecha de género que aún persiste en la ciencia. A la fecha, dijo, sólo uno de cada cinco países ha alcanzado la paridad de género.
Si bien reconoció avances en la participación creciente de mujeres en diferentes disciplinas -en 2016 la brecha era de 28 por ciento, y en los últimos años es de poco más de 30 por ciento-, precisó que en México sólo una tercera parte de quienes hacen ciencia son mujeres. En América Latina el promedio es de 45 por ciento, y en Asia, la tasa más baja, es de 23 por ciento.
Al señalar que el % de mujeres en la ciencia en México es menor al promedio de Latinoamérica, la rectora María Lilia Cedillo invitó a la reflexión. Esto para superar este y otros escenarios, como el hecho de que las mujeres ingresan y ascienden menos que los hombres en el SNI.
Así también, por el predominio de varones en áreas como ingeniería, tecnología, agronomía y ciencias naturales. Mientras que las mujeres en artes, humanidades, educación, ciencias biológicas y ciencias sociales.
Conferencia sobre ciencia y paridad de género
La rectora de la BUAP se pronunció porque se impulsen más apoyos a estudiantes mujeres. Pidió que se preserve la curiosidad de los infantes –que motiva el interés por descubrir- , para cerrar la brecha de género en la ciencia. Con ello, superar el 5 por ciento de mujeres que han sido galardonadas con el Premio Nobel en poco más de tres décadas.
Elogió a figuras como Matilde Montoya, la primera médica en México y el mundo. Ella sufrió acoso y maltrato por parte de la sociedad y, aun así, llegó a ser la primera mujer en obtener el grado de doctora.