El representante de Morena ante el Instituto Nacional Electoral (INE), Alfonso Javier Bermúdez, solicitó invalidar el triunfo de Néstor Camarillo como senador por el PRI. El argumento es que el priista usurpó la cuota indígena y falsificó documentos para cumplir con los requisitos de elegibilidad.
De acuerdo con el Juicio de Inconformidad A022/INE/PUE/CL/09-06-24, cuya copia está en poder de Ambas Manos, el juicio se presentó el 13 de junio, por lo que se encuentra dentro del tiempo estipulado por la ley electoral para la impugnación.
Además de Camarillo, también impugnaron a su suplente, Teodomiro Ortega. Ambos se auto determinaron como indígenas del poblado El Molino en Zacapoaxtla.
Morena acusa que la autoridad electoral fue omisa al verificar que Camarillo cumpliera con los principios de elegibilidad. También que se incumplieron con los lineamientos que se establecen para determinar si efectivamente “los candidatos que se auto inscriben son indígenas”.
Como pruebas, Morena señala que la autoridad ejidal no reconoce los documentos que Camarillo presentó para justificar su candidatura indígena.
Se solicita este órgano jurisdiccional que aplique de manera debidamente los lineamientos para cotejar que dichos ciudadanos no pertenecen a la comunidad a la que se auto adscribieron de manera indebida”.
Acusan también que en los documentos presentados por el exdirigente del PRI:
No se observa que hayan sido expedidas por la autoridad comunal existente (…) no se observa el grupo étnico al que pertenece o si habla alguna lengua indígena”.
El partido guinda, que en Puebla ganó la gubernatura, el Senado, la alcaldía de la capital y que se llevó carro completo en las diputaciones locales y federales, presenta más de cinco jurisprudencias para fortalecer que el INE puede retirarle su constancia de mayoría a Camarillo.
Al final la solicitud es:
Que sean declarados inelegibles los candidatos Néstor Camarillo y Teodomiro Ortega, quienes integran la fórmula al Senado de primera minoría en el estado de Puebla y revocar la constancias de mayoría a los candidatos electos”.
Como dirigente del PRI, Camarillo se agandalló la primera fórmula al Senado para garantizarse un cargo y seguir viviendo del erario.
Esto fue criticado por decenas de priistas que abandonaron el partido. Al final de la elección el PRI sufrió un descalabro, pasó de ser la tercera fuerza política a la quinta, además, perdió todas las alcaldías que tenía en municipios que son cabeceras distritales.
Ya de madrugada, Camarillo dijo que los recursos presentados los contestó su equipo jurídico en tiempo y forma.
En un brevísimo comunicado en su cuenta de X, el aún senador electo consideró normal que se presenten este tipo de procesos post elección.
