El Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP) determinó que el edil de Zaragoza, José Tobías Ramiro Haquet, cometió violencia política de género contra dos regidoras.

En sesión pública, resolvió que durante la gestión de 2018 a 2021 hizo expresiones peyorativas contra las regidoras Agripina Hernández Carmona y María del Carmen Pérez Aguilar.

El alcalde actualmente reelecto por el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) ejerció violencia para aislar, relegar e invisibilizar a las regidoras. Incluso, les limitó la información y la participación en las sesiones de Cabildo y demás actividades del Ayuntamiento.

Ramiro Haquet deberá tomar cursos de sensibilización sobre la violencia política de género. Lo anterior, como medida de reparación y no repetición.

Además, el edil de Zaragoza será inscrito en el Registro Nacional de Personas Sancionadas en Materia de Violencia Política contra las Mujeres en Razón de Género del Instituto Nacional Electoral (INE). También será inscrito en el registro del Instituto Electoral del Estado (IEE).

Otros casos de violencia política de género de presidentes municipales

El caso del edil de Zaragoza no es el único. En Puebla han inscrito a otros ediles en los registros por cometer violencia política de género.

Tal es el caso de Pascual Morales Martinez, expresidente municipal de Francisco Z. Mena emanado de Morena, quien agredió a una regidora.

Cometió violencia simbólica, verbal, psicológica y patrimonial, pues emprendió una campaña de desprestigio contra ella. Así como obstaculizó los pagos del sueldo de la regidora. 

Otro alcalde inscrito en el registró es Bernardino Aquino Beléndez, exedil de San Antonio Cañada, quién retuvo el salario de dos regidoras y las obligó a lavar los baños.

El presidente municipal emanado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), cometió violencia simbólica, económica, psicológica y patrimonial.

Omar Arteaga Ortigoza, exalcalde de Tuzamapa de Galeana, impidió a una regidora hacer su trabajo.

El expresidente de Movimiento Ciudadano (MC) ordenó que una regidora de origen indígena lavara los baños e hiciera el aseo del palacio municipal. Lo anterior, con la intención de que no estuviera presente en las sesiones de Cabildo.

El priista Edmundo Jesús Ramírez Castillo, exalcalde de Santiago Miahuatlán, también cometió violencia política, pues no le quiso dar una oficina a una regidora. Cometió violencia simbólica y tampoco pagó los salarios correspondientes.

Buen fin Viaja a CDMX
Paola Macuitl Gallardo

Paola Macuitl Gallardo

Estudiante de Lingüística y Literatura Hispánica por la BUAP. Reportera desde 2019, ha cubierto la fuente de cultura y gobierno en Info Quórum y Ángulo 7.