Con la promesa de invertir en el proyecto del Tren Maya, defraudan a una decena de padres de familia del Colegio Andes. El monto total asciende a los 35 millones de pesos.
Así lo dio a conocer el pasado 4 de octubre Josué Itt, director de Itt Comunicaciones y Capital. Luego, fuentes confirmaron a Ambas Manos que el fraude a los papás del colegio privado, católico y bilingüe ubicado en San Andrés Cholula fue real.
El responsable de este fraude millonario es Luis Eduardo F., quien ya cuenta con una orden de aprehensión en el estado de Veracruz. Este hombre dijo a sus víctimas dedicarse a la transportación de chatarra con Grupo Carso, propiedad de Carlos Slim.
Mostrando contratos de Carso que obtenía gracias a su tío Óscar, director general de Carso Global Telecom, los convenció de invertir en el Tren Maya, una de las obras más destacadas del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Los montos que entregaron los padres del Colegio Andes van desde los 280 mil y hasta los 5 millones de pesos. El plan, supuestamente, era entrar y ganar la subasta del proyecto: “al transportar la chatarra, obtener una utilidad del 20% y entregar el 10% a los inversionistas”, explicó Josué Itt.
Sin embargo, en cuanto le entregaron el dinero, Luis Eduardo F. dejó de contestar las llamas y de un día para otro se desapareció.
Defraudadora de La Vista se fue de vacaciones y deja “colgados” a sus inversionistas de Xifra
Otro caso de poblanos defraudados es el de Xifra. El pasado 14 de mayo, Montse N. mejor conocida como la defraudadora de La Vista y su novio Mauricio, publicaron un video en redes para anunciar que Xifra cerraba sus puertas.
Los defraudadores quisieron vender el discurso de que habían cerrado para crecer y convertirse en la empresa Decentra; sin embargo, el cierre de Xifra sucedió luego de la caída del bitcoin, dejando colgados a todas las personas que fueron engañadas para invertir.
Desde entonces, en redes sociales proliferan los post de los defraudados que entre ellos divulgan cuánto dinero les deben y desde cuándo no les han pagado.
En Twitter, incluso, ya existe una campaña en contra de Montserrat N. por falta de pago.
