La familia integrada por Uriel Vázquez, de 34 años de edad, su esposa Angélica Rivera y sus hijos Abad, de 9 años de edad e Iker, de 7 años, fue asesinada en el municipio de Zoquitlán. Después les prendieron fuego.
El multihomicidio ocurrió la noche del viernes 6 de octubre, minutos después del sismo de 6.0 grados con epicentro en Matías Romero, Oaxaca que fue perceptible en 38 municipios poblanos. Debido a esto, se creyó que el incendió derivó de una explosión por el temblor.
Sin embargo, sus seres queridos negaron esta versión, pues en el domicilio de la familia Vázquez Rivera ubicado en el barrio Dos Caminos de la comunidad de Tepexilotla, encontraron sangre y casquillos percutidos.
Anoche, en entrevista con medios de comunicación de la región, parientes de las víctimas declararon que antes de que la vivienda ardiera en llamas los vecinos escucharon detonaciones de arma de fuego.
La comunidad se encuentra consternada por esta tragedia:
me entristece porque era pura gente buena”, “ellos son gente de trabajo, gente muy luchadora”, son algunos de los comentarios que hicieron.
Familiares de Uriel exigen la intervención de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla, pero también de la Fiscalía General de la República (FGR).
Hace cuatro meses, Serafín Vázquez, familiar de Uriel, desapareció junto a su hijo Ricardo. Aunque ya hay una denuncia hasta el momento se desconoce su paradero.
Los pobladores revelaron que durante los últimos meses se registraron levantones y homicidios, cuyas víctimas presentaron signos de violencia.
Hasta el momento se desconoce cuál es el posible móvil de este multihomicidio que terminó con la vida de dos inocentes niños y sus padres.
Zoquitlán se localiza en la Sierra Negra del estado de Puebla. Sus colindancias son al Norte con Eloxochitlán; al Sur con Coyomeapan; al Oriente con San Sebastián Tlacotepec; y al Poniente con Ajalpan y Coxcatlán.
El gobernador Sergio Salomón condenó el multihomicidio que involucró a dos niños.
A través de un comunicado, la SSP de Puebla indicó que tienen como hipótesis del multihomicidio de la familia con la violencia en Veracruz.
